INAUGURACIÓN
La Cátedra Góngora buscará llevar al poeta a «todos los hispanohablantes»
Una conferencia de Pablo García Baena abre hoy su amplia agenda para este otoño
El nombre de Luis de Góngora está unido a Córdoba, su ciudad, donde nació y murió y cuya esencia es indispensable para comprender su obra, dicen los expertos. Ahora, casi 400 años después de su muerte, la ciudad pone de largo la institución que tendrá que impulsar la investigación sobre el gran renovador de la poesía española en el Siglo de Oro, divulgarla y proyectarla hacia la Educación, para que los niños y jóvenes se acerquen al mayor de los escritores de la ciudad.
La Cátedra Luis de Góngora se pone este jueves en marcha, impulsada por la Universidad de Córdoba, el Ayuntamiento y la Diputación Provincial, y lo hace con una conferencia a cargo del que Joaquín Roses, el director de esta nueva institución cultural, llamó alguna vez «el mejor discípulo» del autor de la «Fábula de Polifemo y Galatea». El cordobés Pablo García Baena abrirá la actividad de la Cátedra con el ciclo «Góngora Vivo: cómo leen a Góngora los creadores de hoy».
Comenzará así a funcionar un centro de estudio e investigación permanente sobre el poeta, consecuencia del Foro Góngora Hoy que el propio Joaquín Roses dirigió entre 1996 y 2007, y que creó el caldo de cultivo para que una buena parte del conocimiento sobre el autor sea en la ciudad, como demuestran la bibliografía más reciente y los últimos estudios.
Nada convencional
Será a las 20.00 horas, en la Casa Góngora, sita en la calle Cabezas, y será la primera de las tres vertientes del trabajo en este otoño. Por este ciclo pasarán los poetas Antonio Carvajal (jueves 6 de noviembre), Andrés Sánchez Robayna (martes 18), Clara Janés (jueves 27) y Pere Gimferrer (jueves 4 de diciembre). No será, aseguró Joaquín Roses, una conferencia leída, sino una experiencia mucho más interactiva. «Se le podrá preguntar cuál fue el maestro que le hizo leer a Góngora, en qué edición lo encontró por primera vez y cuál es su experiencia personal», dijo a modo de ejemplo.
Joaquín Roses, profesor de la Universidad de Góngora, experto en la obra del autor y gran impulsor de esta idea, explicó que durante el otoño también se celebrarán las llamadas «Tertulias del Dragón», que han recibido su nombre de las letras centrales que forman el nombre de la nueva institución cultural (Cátedragóngora), pero también de la articulación de las iniciales en el logotipo.
El centro las define como «conversación abierta con estudiantes, lectores, letraheridos, indolentes, amantes del peligro verbal y público en general». Se reunirán para analizar algunos de los textos más conocidos de Góngora. Así, se hablará en comunidad, sin jerarquías de «Hermana Marica» (martes 4 de noviembre), «Ándeme yo caliente») (martes 11), y los sonetos «A Córdoba» (jueves 20), «Grandes más que elefantes y que abadas» (martes 25) y «Menos solicitó veloz saeta» (martes 2).
Tampoco se prestarán a clichés las presentaciones de libros, aunque Joaquín Roses no quiso desvelar las claves. Así, el sábado 8 se dará a conocer el libro con las actas de «El universo de Góngora: orígenes, textos y representaciones», editado por el propio Roses, y que recoge los textos del congreso celebrado hace tres años. Una semana más tarde se dará a conocer el libro «Todos es de oídas», en el que Amelia de Paz habla del único documento en que se recoge el autógrafo del escritor, y que fue un proceso contra un inquisidor. Para el futuro dejó otros proyectos, como la divulgación entre los alumnos desde Primaria hasta Bachillerato la creación de «un centro de presentación en la casa, donde las personas que visitan la ciudad y se pregunten quién era Góngora lo sepan».