Tres detenciones tras los últimos actos violentos en Bujalance

La Guardia Civil arresta a tres mujeres de etnia gitana por agredir a los dueños de un negocio

ANDRÉS ORGAZ

Tres mujeres han sido detenidas por la Guardia Civil y puestas a disposición judicial como supuestas autoras de agresiones a un matrimonio de Bujalance, que regenta una floristería y que constituyen uno de los últimos episodios de violencia en el municipio y que tienen a un grupo de etnia gitana como protagonista. Las investigaciones de la Benemérita comienzan a dar sus frutos para poner fin a la oleada de altercados, robos e inseguridad ciudadana que el municipio de la comarca del Alto Guadalquivir viene sufriendo durante los últimos diez días. En concreto, se han producido dos denuncias por agresiones. Los hechos, que se produjeron entre vecinos del municipio, implicaron a payos y gitanos en dos peleas, que se ocasionaron en la Floristería «Sevi» y en el pub «El Frisko».

Según ha podido saber ABC, el juicio contra las tres detenidas se celebró ayer en el Palacio de Justicia de Montoro.

En declaraciones realizadas a este periódico, el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, hizo «un continuo llamamiento a la convivencia y al sentido común de los ciudadanos de Bujalance, para frenar este tipo de situaciones». Añadió que «todo hecho delictivo se denuncie para que puedan actuar con normalidad las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad».

Pleno extraordinario

En permanente contacto con el Ayuntamiento de Bujalance, Primo Jurado apuntó que «desde hace aproximadamente un mes se ha reforzado el dispositivo de la Guardia Civil en la localidad hasta los 50 efectivos para evitar los robos». Así, y tras las peleas producidas la semana pasada, «también se habilitó un dispositivo específico para la manifestación del pasado domingo», como medida de prevención, en el que intervinieron efectivos de Guardia Civil y miembros de la Unidad de Seguridad Ciudadana.

Además, a petición del propio Consistorio bujalanceño, presidido por Elena Alba (PA), alcaldesa en funciones, en el día de hoy se celebrará una Junta Local de Seguridad Extraordinaria «para abordar nuevas medidas».

Esta misma tarde, a las 20.30horas, la Corporación Municipal celebrará un pleno extraordinario en el que se analizará el delicado momento de crispación vecinal, que el pasado domingo movilizó a más de 1.000 personas, que se concentraron en la plaza mayor reclamando seguridad y una convivencia pacífica entre payos y gitanos.

La acción de protesta, que fue convocada a través de WhatsApp y redes sociales, dejó muy claro el malestar popular «y que hay que acabar con esta situación», apuntó Antonia López Cabanillas, vecina de Bujalance, quien exigió al Ayuntamiento «que ponga todo de su parte».

Por su parte, la alcaldesa en funciones aseguró que «estamos haciendo todo lo que podemos por la seguridad de nuestro pueblo». Alba aprovechó el tirón mediático que han tenido los últimos episodios de violencia para «hacer un llamamiento al civismo y al ejercicio de la libertad con responsabilidad, y a la pacífica convivencia entre todos los vecinos».

En la concentración del pasado domingo también estuvieron presentes numerosas personas de etnia gitana, que acudieron para denunciar los hechos producidos durante los últimos días porque «no podemos pagar justos por pecadores», según indicaron a este periódico.

Tres detenciones tras los últimos actos violentos en Bujalance

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