ESPAÑA SUPERA LA CRISIS FINANCIERA
El BCE ha determinado que el sector financiero nacional está bien capitalizado y no necesita adoptar medidas adicionales
LAS pruebas de solvencia que publicó ayer el Banco Central Europeo (BCE) confirman que España ha dejado atrás la histórica crisis financiera que tambaleó los cimientos del sistema bancario nacional, gracias a la extraordinaria labor de saneamiento y reestructuración que ha llevado a cabo el Gobierno desde 2012. La Banca española no solo ha superado los denominados test de estrés, un detallado examen a nivel europeo para medir la fortaleza de las entidades ante distintos escenarios económicos, sino que lo ha hecho con muy buena nota. El BCE ha determinado que el sector financiero nacional está bien capitalizado y no necesita adoptar medidas adicionales, ya que las quince entidades analizadas superan ampliamente el nivel mínimo de capital exigido, tanto en el escenario base (8 por ciento) como en el adverso (5,5).
En concreto, la Banca española contaría con un colchón adicional de casi 56.000 millones de euros en el peor de los contextos económicos que prevén dichas pruebas, muy por encima de la media del sector europeo y registrando, de hecho, la segunda mejor nota de la zona euro, tras Estonia. Es decir, en poco más de dos años España ha pasado de tener uno de los sistemas financieros más débiles y frágiles del continente a tener uno de los más solventes y sólidos. Por entidades, Kutxabank dispondría del mayor ratio de capital en el escenario adverso, seguida de Bankinter, BFA-Bankia, Caixabank y la antigua Novacaixagalicia –hoy Abanca–. El caso de Bankia merece una mención aparte, ya que, tras protagonizar el mayor rescate financiero de España, hoy es una de las entidades más fuertes de Europa y, además, está generando beneficios, lo cual evidencia el correcto proceso de recapitalización realizado por el Ejecutivo, así como la positiva labor de gestión actual. Estos buenos datos contrastan con la delicada situación que registran, especialmente, la banca italiana y la griega. Así, del total de trece entidades europeas que tendrán que adoptar nuevas medidas para reforzar su solvencia, cuatro son italianas, y tres, griegas.
Las pruebas del BCE arrojan una magnífica noticia para el conjunto de la economía española. La situación de insolvencia en la que cayeron numerosas cajas de ahorro debido al estallido de la burbuja inmobiliaria, unida a la irresponsable y opaca gestión que realizaron las autoridades competentes bajo el anterior gobierno del PSOE, provocó una enorme incertidumbre y desconfianza hacia España por parte de los inversores internacionales. Sin embargo, estas dudas se despejaron por completo tras la profunda reestructuración financiera iniciada en 2012. Gracias a los esfuerzos efectuados en esta materia, España cuenta hoy con un sistema bancario sólido y fiable, y, por tanto, capaz de volver a contribuir al crecimiento y a la creación de empleo mediante la reapertura gradual del crédito a familias y empresas. Tras largos años de sombras y dificultades, la economía española ha terminado superando su grave crisis financiera.