Desde El Carpio, contra Goliat

La Peña Cordobesista Cruz Carrascosa fomenta el cordobesismo desde 1999

JOSÉ M. DOMÍNGUEZ

El 13 de febrero de 1972, el Córdoba CF soñó durante diez minutos con derrotar al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, una misión prácticamente imposible. La distancia entre David y Goliat ya era inmensa en aquella época, hace 42 años. Pero desde el minuto 4 del choque que midió a blanquiverdes y merengues, hasta el 14 de juego, campeó el 0-1 en el marcador del estadio de la Castellana. El autor de la momentánea hazaña fue Manuel Cruz Carrascosa, que, aunque no pudo disfrutar del resultado final —el conjunto merengue remontó y se impuso por 4-1—, con aquella diana se convertiría en un referente del cordobesismo de todos los tiempos.

En 1998, cuando comenzó a tomar forma —se fundó en abril de 1999— la primera peña cordobesista de El Carpio, seguía vivo aquel gol en el imaginario califal. Y el nombre del ariete jiennense se puso sobre la mesa. «Queríamos rendir homenaje a un ídolo que no fuese efímero», cuenta hoy Onofre Fernández, presidente de la Peña Cruz Carrascosa. Miguel Rodríguez «Flore», uno de los fundadores y cabeza visible de la peña desde sus inicios, fue uno de los que se acordó del mítico delantero, en contraposición a otros jugadores que «tienen una peña en su honor simplemente por haber pertenecido uno o dos años al Córdoba», según explica el actual presidente.

Fernández dirige la peña desde hace ocho años. Destaca la disponibilidad de quien le da nombre. «Desde el primer día, y siempre que se lo hemos pedido, Manuel [Cruz Carrascosa] ha estado encantado de echarnos una mano. Le hizo mucha ilusión que pensásemos en él para ponerle su nombre a la peña. La verdad es que queríamos a alguien cercano, y él está casado con una mujer de Pedro Abad», detalla el presidente, que pone como ejemplo de esa gratitud recíproca alguno de los regalos que ha hecho Cruz Carrascosa a la asociación: «Ahora tenemos una sede propia, que es algo por lo que llevábamos luchando bastante tiempo, y tenemos enmarcada la camiseta que Manuel utilizó en aquel partido contra el Madrid».

Allí se reúnen más de 80 socios, que pagan una cuota anual de 25 euros, además de cualquier simpatizante del conjunto califal. El local, situado en la plaza Alto Guadalquivir, es un verdadero bastión en blanco y verde. «Nuestra intención es crecer poco a poco y, sobre todo, intentar inculcar el sentimiento cordobesista», apunta Fernández, que asume que «en los pueblos es difícil a veces competir con los grandes, con el Barcelona y el Real Madrid». «La gente se olvida de que tenemos un equipo, el Córdoba, que es el de nuestra provincia. Pero poco a poco va calando, y especialmente el año pasado se pudo ver que El Carpio es una localidad muy cordobesista», subraya. Se refiere a los partidos que filial blanquiverde disputó en el estadio municipal carpeño, a los que acudía un gran número de seguidores del pueblo.

En quince años de andadura, a los integrantes de la peña les ha dado tiempo a vivir «de todo». El presidente apenas puede acordarse de momentos negativos. Recuerda entre risas cómo se aprende a animar al Córdoba, ya que no todos los cánticos son tan fáciles como parecen... «Un socio no se sabía esa de “ésta es tu hinchada, tu hinchada, tu hinchada blanca y verde...” y cantaba “pinchada, pinchada...”, así que terminamos incorporando la anécdota en nuestra pancarta», relata Fernández, que habla ilusionado del buen ambiente que se vive en la peña, de los peroles y, sobre todo, de su equipo. Al final, todo vale para ganar esa batalla contra «Goliat», contra el Barcelona y contra el Madrid. Como empezó a hacer hace 42 años Cruz Carrascosa en el Santiago Bernabéu.

Desde El Carpio, contra Goliat

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación