Poco «estéticos», pero legales
El Banco de España desconocía los sueldos en Catalunya Caixa
El Banco de España no supo del aumento de sueldos en Catalunya Caixa hasta que lo publicó la prensa. Con todo, y pese a reconocer que las subidas salariales en la entidad eran inadecuadas desde el punto de vista «estético», estas eran legales. Así se pronunciaron los tres inspectores del Banco de España que declararon ayer ante el juez que investiga las retribuciones salariales de los exdirectivos de la entidad, entre ellos su presidente entre 2005 y 2010, Narcís Serra, y su director general entre 2008 y 2010, Adolf Todó (también presidente entre 2011 y 2013). Ambos, junto a otros 40 directivos, están imputados por un delito de administración desleal, al subirse el sueldo en 2010 cuando la entidad estaba al borde de la insolvencia y ya había recibido ayuda del FROB.
En su declaración, los inspectores del Banco de España aseguraron que al tener conocimiento de los aumentos llamaron a Todó para recriminarle una decisión que consideraron inadecuada dada la difícil situación por la que atravesaba la entidad. Con todo, ante el juez, consideraron legales las remuneraciones, incluso por debajo del sector, apuntaron fuentes judiciales a Efe. En octubre de 2013, cuando declaró ante el juez, Serra argumentó como línea de defensa que las remuneraciones se comunicaron tanto al Banco de España como al FROB, que, afirmó, no pusieron ninguna objeción.
La investigación sobre Catalunya Caixa, además de a los sueldos de sus gestores, alcanzará también a su política crediticia: en concreto, el FROB ha remitido a la Fiscalía una serie de operaciones que podrían haber causado un perjuicio de 900 millones a la entidad.