La Guardia Civil ha llamado a varios titulares de las tarjetas de la farmacia clandestina de Jerez

El titular del juzgado de instrucción número 4 de Jerez de la Frontera mantiene bajo secreto de sumario las actuaciones abiertas por el «consultorio» farmacéutico semiclandestino de la barriada de La Constancia por lo que no se ha precisado qué posibles cargos pesan contra el detenido, Pepe S., que fue investigado por un caso similar hace ya más de diez años . Otra persona podría haber sido ya presuntamente implicada en la fase de explotación de la investigación, pero el hermetismo legal es máximo ante la alarma social generada, como señaló el Instituto Armado durante el registro del lunes.  No se descarta que José V. pudiera estar acusado de un presunto delito contra la salud pública  y otros conexos de tipo económico pues se intervinieron ordenadores y documentación durante la diligencia de entrada y registro en el local vecinal y en el domicilio particular.

El presunto cabecilla de la trama operaba bajo el amparo de la Asociación Jerezana por el Bienestar y la Salud , que estaba registrada como tal, pero, según averiguaciones de ABC, no parece que pudiera dedicarse legalmente a ser un «almacén» de fármacos y acaparar un gran número de tarjetas sanitarias de titularidad individual. Además, como han reconocido algunos ciudadanos , en el consultorio también se aplicaban inyecciones y se realizaban donaciones de sangre. Esta segunda acción podría ser perfectamente legal pues los equipos de transfusión sanguinea se desplazan habitualmente a centros de barrio para captar donaciones y entre ellos figura el de la Constancia, como han explicado fuentes del SAS.

Varias personas han reconocido que han sido consultadas por la Benemérita por el funcionamiento del consultorio y sus tarjetas . El investigado no es farmacéutico de profesión. El Colegio Oficial de Cádiz ha propiciado en gran medida esta investigación policial y ha confirmado que llevaba tiempo requiriendo un mayor control de este lugar. Sospecha que hay indicios de prácticas irregulares contra la salud pública y ha colaborado con la Guardia Civil. Algunos profesionales han señalado a este medio que la «existencia de ese «dispensario» era conocida desde hace años pero nadie intervenía». El local está ahora cerrado por «motivos personales», pero varios vecinos, que siguen argumentando la «gran labor» de Pepe, critican que se han quejado ahora sin tarjeta.  El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha llamado a la «prudencia»  por la reserva judicial que impera en el caso y, como han señalado fuentes oficiales, porque el «tema va para largo».