CÁDIZ
Estrecho de Gibraltar: ¡Liberad a Toño!
Buscan en el Estrecho de Gibraltar a un cachalote atrapado en una red de pesca en una carrera contrarreloj y con el viento de levante como enemigo a batir
Lo que iba a ser una de tantas salidas al mar para fotografiar cetáceos se convirtió en un S.O.S. para salvar a un cachalote atrapado en una red de pesca. Ocurrió el pasado día 10 sobre las dos de la tarde en el Estrecho de Gibraltar, entre Punta Europa y el puerto de Tánger Med. Eva Carpinelli, bióloga marina y presidenta de la asociación conservacionista Nereide, con base en Tarifa (Cádiz), salió a navegar ese día por el Estrecho de Gibraltar en busca de cachalotes para tomar fotografías junto con otros compañeros entre los que estaba Rafael Fernández Caballero, campeón mundial de fotografía submarina.
La jornada les deparó sin embargo una desagradable sorpresa: se toparon con un cachalote atrapado en una red de pesca que, según Carpinelli, dificultaba su movimiento e impedía que se sumergiera: «“Su soplo era débil, le costaba respirar. Estaba desmayado , pero entró el levante , íbamos en una embarcación pequeña, las olas ya eran de más de dos metros y nos tuvimos que marchar». Los tripulantes se vieron obligados a volver a tierra con la impotencia de no poder ayudar al cetáceo ni vigilar su estado vital.
Las fotografías que tomaron al cachalote, una especie amenazada y que goza de especial protección , han permitido identificarlo. El Estrecho de Gibraltar cuenta con un catálogo fotográfico de identificación. La asociación contribuye con un proyecto denominado «Aleta a la vista» , cuyo objetivo es colaborar con el sector pesquero y náutico-recreativo para incorporar dicha información a la base de datos sobre cetáceos.
El equivalente a la huella dactilar
«Cada individuo tiene una marca especial identificativa . En el cachalote es muy simple y está en la aleta caudal . Es el equivalente a nuestra huella digital. Gracias a las fotos que hicimos pudimos confirmar qué individuo es. Se trata de Toño », indica Carpinelli.
Toño es un viejo conocido en la zona porque lleva varios años frecuentando el Estrecho de Gibraltar. La primera vez que los grupos de avistamiento de cetáceos del Estrecho lo vieron fue en 2015 . No se sabe su edad pero sí que mide unos 13 metros de longitud y, sobre todo, que su vida corre un serio peligro.
Y es que las redes de pesca suponen una seria amenaza para la megafauna marina , ya que pueden provocar daños físicos a los animales e incluso su muerte. «Además de estar atrapado en la red desde la boca, Toño llevaba varios metros en la cola, lo que es muy peligroso porque puede engancharse en ellas otro animal o, peor aún, las hélices de algún barco. Son trampas mortales para los animales marinos protegidos », explica, al tiempo que recuerda que se trata de un arte de pesca prohibida por la directiva europea y que sin embargo se sigue utilizando en el Estrecho.
La asociación Nereide asegura que se intenta coordinar el rescate de Toño con varias entidades para liberarlo lo antes posible pero las condiciones climáticas lo están poniendo realmente difícil : «El tiempo no nos permite salir a navegar por el fuerte viento de levante y lo haremos en cuanto las condiciones sean favorables y con un equipo de buceo profesional».
Este avistamiento y la alerta que ha provocado en la zona han hecho que las Administraciones aúnen esfuerzos para poder localizar y liberar a Toño. Así, el equipo perteneciente al Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz (CEGMA) de Algeciras de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía lleva colaborando desde la semana pasada con el Ministerio para la Transición Ecológica en la búsqueda de Toño.
Además, según ha informado la Junta, medios de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía (Amaya), entidad adscrita a dicha consejería, se podrían incorporar al dispositivo cuando las condiciones meteorológicas lo permitan, si el Ministerio lo necesita, aportando la embarcación de la que disponen en Algeciras.
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