Cuatro presos se han suicidado en la cárcel de Algeciras en lo que va de verano

Tres reclusos y una reclusa se han quitado la vida en lo que va de verano en la prisión de Botafuegos, en Algeciras (Cádiz), el último este miércoles. Otros tres lo han intentado pero los funcionarios han llegado a tiempo para salvarlos.

Es la dramática situación que vive un centro penitenciario masificado, con unos 1.200 internos, y para el que, tanto el sindicato Acaip-UGT como la asociación de funcionarios de prisiones Tu Abandono Me Puede Matar exigen más recursos psiquiátricos y más medios para atender a la población reclusa de este centro.

La última muerte se produjo el miércoles. Según denunció Acaip, se trataba M.J.C.P., un recluso de 41 años que ingresó en prisión por primera vez en 2015 y que estaba en calidad de preso preventivo a la espera de juicio. Un funcionario lo encontró en su celda con la funda de la almohada anudada al cuello . Tras avisar a los servicios médicos, que intentaron reanimarlo durante más de veinte minutos, fue certificado su fallecimiento. Instituciones Penitenciarias ha abierto una investigación interna para esclarecer las causas de la muerte.

Acaip-UGT reconoce que aunque el riesgo cero no existe, este tipo de sucesos se podría paliar con una atención sanitaria «más completa» y denuncia que en la prisión de Algeciras no se pueden formar equipos multidisciplinares adecuados para atender a internos con patologías mentales.

Demanda además a Interior más psiquiatras ya que asegura que en esta prisión «se sale del paso contratando a dicho especialista tres veces al mes, lo que es insuficiente dada la elevada demanda y la lista de espera de internos para ser atendidos».

A esta coyuntura añade la falta de personal médico, la excesiva carga laboral para atender a un centro masificado y la «nula informatización de los historiales médicos, lo que dificulta la atención sanitaria».

La asociación de funcionarios de prisiones Tu Abandono Me Puede Matar reclama también la presencia continua de un especialista en psiquiatría en esta prisión, así como completar la plantilla sanitaria con más médicos, enfermeros y auxiliares.