Centenares de toneladas de basura, atrapadas en Gibraltar por el Brexit

Esto ha provocado que dichos residuos estén siendo depositados de manera temporal en la zona este del Peñón, frente a la playa, y la montaña resulta ya impresionante. De persistir la situación podría generarse un problema de salud pública.

Gibraltar estaba cubierta hasta ahora por la legislación de la Unión Europea (UE), concretamente con el Reglamento (CE) 1013/2006 relativo a los traslados de residuos (Reglamento sobre traslado transfronterizo de residuos o Reglamento TSW, por sus siglas en inglés), Ahora, con la entrada en vigor del Brexit, Reino Unido y por tanto Gibraltar no forman parte de la UE y ya no es aplicable dicha normativa.

Una empresa gibraltareña contratada por el Gobierno del Peñón se encargaba de trasladarlos hasta la planta de tratamiento de residuos que la empresa Aguas y Residuos Campo de Gibraltar (Arcgisa), dependiente de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, gestiona en la vecina localidad de Los Barrios . Así se ha hecho durante las últimas décadas gracias a un convenio con el ente comarcal.

Los permisos para sacar esta basura doméstica de Gibraltar los venía tramitando la Junta de Andalucía pero ahora han pasado a ser competencia del Ministerio de Transición Ecológica al ser considerada esta actividad como una exportación desde un territorio tercero.

Gibraltar, con más de 30.000 habitantes, tiene una población flotante de alrededor de 14.000 trabajadores transfronterizos, además de quienes entran a la colonia por vía terrestre a través de la Aduana de La Línea de la Concepción, el aeropuerto y el puerto de Gibraltar, por turismo, ocio o negocios.

Cada año , según los datos facilitados a ABC en su día por la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, más de 30.000 toneladas de basura doméstica son sacadas del Peñón en camiones a través de la Aduana terrestre de La Línea y llevadas al complejo medioambiental Sur de Europa de la citada empresa pública. Por este servicio Gibraltar paga más de 1,2 millones de euros cada año a la empresa pública Arcgisa.

Ni la Mancomunidad de Municipios ni Arcgisa han querido pronunciarse sobre el problema que se ha generado y sobre si peligra el convenio suscrito en su día, que supone una importante inyección de fondos para la entidad comarcal.

Por su parte, la asociación Verdemar-Ecologistas en Acción asegura que Reino Unido negocia con la UE un acuerdo sobre este asunto y llama a que se alcance cuanto antes para que se garantice «una buena trazabilidad» de estos residuos «antes de que sean un problema ambiental y se vean todo tipo de basuras en el Estrecho de Gibraltar».

La organización conservacionista sostiene que es una cuestión burocrática y apela a que se encuentre una solución lo más pronto posible.

Sobre la posibilidad de trasladarlos en barco a Reino Unido , los ecologistas alertan que supondría una «huella ecológica de envergadura».

Si no hay solución, el Gobierno de Gibraltar ya tiene un plan B que forma parte de sus planes de contingencia por si hay una divorcio de la UE a las bravas. Bruselas y Londres negocian una salida.

Reino Unido destinó en torno a un millón de euros a la adquisición de maquinaria para triturar, compactar y envolver estos desechos para su almacenamiento y posterior exportación en contenedores, y las donó a Gibraltar.

Si el problema persiste y según ha sabido este diario, la idea del Gobierno gibraltareño es triturarlos, compactarlos y enolverlos para almacenarlos temporalmente en alguno de los túneles del Peñón hasta que la actual situación se aclare y se tenga que tomar una decisión definitiva sobre este asunto.