Semana Santa Cádiz

La Viña espera a su Cristo de la Misericordia

La imagen ya restaurada por Pilar Morillo y Álvaro Domínguez regresa a su templo el 13 de septiembre

Salida procesional del Lunes Santo de 2023 Nacho Frade

A. M.

Cádiz

La Viña espera a su Cristo. El barrio cuenta los días para el regreso de su gran devoción. La imagen del Santísimo Cristo de la Misericordia estará de nuevo en su iglesia de la Palma el próximo 13 de septiembre. El Señor del barrio vuelve a casa una vez que ha sido restaurado por Pilar Morillo y Álvaro Domínguez. La espectacular talla de Francisco Buiza ocupará de nuevo su capilla en el pequeño templo gaditano después de cinco meses de ausencia.

Será entonces, ese viernes, cuando se verá el resultado de esa labor que han realizado los restauradores. En esa jornada víspera de la festividad de la Exaltación de la Santa Cruz se abrirán las puertas de la iglesia durante todo el día para que por fin los vecinos, devotos y hermanos de la archicofradía de la Palma contemplen al Señor.

El hermano mayor de la corporación del Lunes Santo, Pedro Bueno, ya ha tenido la oportunidad de ver al Santísimo Cristo de la Misericordia. «El resultado es espléndido. Siento una alegría enorme porque el Señor tiene de nuevo la policromía original, la que Buiza le puso en el año 1969«.

Se da la circunstancia de que hasta el momento este Cristo no había sido intervenido en ninguna ocasión por lo que ya esta restauración es histórica. «Va a impactar por el hecho de recuperar esa policromía, porque ahora después de muchos años, vamos a ver los pies y al detalle, la sangre que brota. Yo siempre he conocido los pies ennegrecidos de tanto tocarlos y besarlos pero ahora tras esta actuación se va a apreciar cómo realmente lo creó Buiza».

Si bien se va a apreciar de forma notable la recuperación de la policromía en las piernas, el rostro del Señor de la Misericordia mantiene su esencia. «El rostro no se ha tocado para que tenga su impronta morena. Sí la corona de espinas y en la cabeza se han instalado los casquillos metálicos para las potencias ya que habían dado de sí y ahora estamos en prepararlas para que sea de rosca que es el sistema que se emplea ahora normalmente«, comenta Pedro Bueno. Además se han reparado las grietas existentes en la imagen: hombros, axilas, brazos, pecho, costado, sudario y parte trasera de los muslos del Señor.

El máximo responsable de la archicofradía de La Palma también aclara que tal y como se aprobó en su día en cabildo extraordinario se ha restaurado el INRI y la cruz del señor. «La cruz se ha tenido que restaurar en el Corralón de los Carros por las dimensiones que tiene. Pero lo más llamativo a la vista es la policromía original de las piernas, el detalle de la sangre de los pies, porque todo eso había desaparecido con el paso del tiempo«. Pedro Bueno insiste en que la sensación de los miembros de la junta que han visto ya la imagen restaurada es muy buena. »Estamos muy contentos. Hemos coincidido todos en que ha sido un acierto la restauración del Señor y volver a imprimirle el carácter que Buiza que le dio en el año 1969, porque no se había restaurado nunca antes«.

Una jornada muy esperada

El viernes 13 de septiembre será un día por tanto muy especial en la Viña. El Cristo de la Misericordia será recibido con mucha expectación y fervor. La archicofradía mantendrá la iglesia abierta al mediodía para que todos puedan acudir a contemplar la imagen. Y allí estará el Señor, en el centro del templo. Pero además esa jornada coincide con el segundo día de triduo de la Virgen de las Penas y a las 20.00 horas será la misa con ambos titulares ya presentes.

La corporación del Lunes Santo lo tiene todo preparado para recibir al Señor de la Viña. De hecho estos últimos días se ha adecentado su altar para que esté mejor que nunca. Se ha cambiado la tela que cubre las paredes, que estaba puesta desde la reforma del año 1992 y los dos camarines de la Virgen de las Penas y San Juan han sido pintados y se les ha dado más realce. Además los arcos se han dorado y se ha sustituido el basamento de los camarines por una madera más grande para que la ropa quede dentro del mismo. «También será diferente el punto de vista del Señor puesto que antes quedaba encastrado en la capilla pero ahora quedará directamente a la vista de la persona», comenta Pedro Bueno.

Con todo listo, la pequeña iglesia de la Palma espera a su Cristo de la Misericordia que tras más de medio siglo ha pasado unos meses fuera de su sede. La archicofradía ya tiene previsto además la celebración de una conferencia en la que los restauradores Pilar Morillo y Álvaro Domínguez expliquen con detalle la intervención de la imagen.

 

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