semana santa cádiz 2024
«Va a ser un pregón con mis valores, crítico y con Cádiz por delante»
fernando díaz, pregonero
El periodista y cofrade cuenta los días para dar voz a una Semana Santa que «es mucho más que sacar una procesión a la calle, la concibo de una manera más amplia»
El cartelista y el pregonero abren la Semana Mayor gaditana
Fernando Díaz, pregonero de la Semana Santa
Recién entrado el otoño pero perdurando las calores del verano, el periodista y cofrade gaditano Fernando Díaz ya se sienta delante de su ordenador plasmando las primeras ideas y textos de lo que va a ser el pregón de la Semana Santa de Cádiz 2024. Una tarea nada sencilla pero que el también hermano mayor de la Soledad afronta con «ilusión, respeto y nada de miedo. Mientras se tenga salud el miedo no existe», recuerda.
El pregonero reconoce que la decisión del Consejo de Hermandades fue una auténtica sorprea para él, y que ahora que afronta la misión de dar voz a la Semana Santa no quiere perder el enorme cariño que tiene por las imágenes gaditanas, pero siempre dejando claro las cosas a mejorar, el aspecto crítico y con un matiz importante: «Cualquiera puede ser pregonero», tal y como él mismo apunta.
¿Saboreando aún el nombramiento?
«La verdad que sí. Han sido días de locura y sobre todo de mucho cariño a mi persona que te deja abrumado. Saboreando lo que es una gran noticia no solo para mí, sino también para nuestra cofradía de la Soledad. Estamos tratando de reorganizando todo para que los viene ahora».
Para la hermandad es una gran noticia
«Las felicitaciones están siendo continuas, muchos hermanos lo van a sentir como algo suyo y propio. Es un auténtico orgullo para la hermandad que una persona de la cofradía pueda poner voz a la Semana Santa de Cádiz».
¿Y cómo se le pone voz a la Semana Santa?
«Con muchísimo entusiasmo, mucho cariño y engrandeciendo nuestra Semana Santa. También quiero dejar claro aquellos aspectos que tenemos que mejorar, una mirada crítica siempre. Poner voz desde el cariño, el respeto y desde muchos valores que trascienden sacar una procesión a la calle. Concibo la Semana Santa de una manera mucho más amplia, no es solo sacar una procesión a la calle. Convivir en hermandad, caridad y vivir todo el año lo que es una hermandad.
Un pregón con una mirada especial a sus titulares...
«Me gusta tanto la Semana Santa de Cádiz, las devociones y los titulares. Todas van a tener ese hueco pero no puedo obviar mi amor por la hermandad de la Soledad, la de Sanidad que tiene una vinculación especial con mi madre y por supuesto el Señor del Prendimiento porque el Rey del Mentidero está siempre en mi corazón».
¿Se imaginaba ser pregonero?
«Te doy mi palabra que jamás hubiera pensado que iba a ser pregonero por el enorme potencial de cofrades que hay en la ciudad. Uno está en sus cuestiones laborales, familiares y cuando Juan Carlos Jurado me comunica su decisión le digo que está loco y me saca totalmente de contexto. Luego lo vas madurando poco a poco, lo hablo con mi mujer que era la única persona de mi familia que lo sabía. Esa conversación fue determinante para embarcarme en esta aventura que afronto con mucha ilusión, respeto pero miedo en absoluto. El miedo va por otras vertientes y mientras haya salud eso no existe.
De Fernando Perez a usted, dos periodistas
«Es circunstancial que un pregón lo haga un periodista. El año pasado Fernando Pérez hizo un pregón brutal pero otros pregoneros han dejado también el listón muy alto. La preparación de un pregonero es vivir la hermandad desde niño, un pregonero puede serlo cualquier persona. Es anecdótico que seamos dos periodistas seguidos porque entiendo que un pregonero expone su pasión desde niño, sus vivencias y da igual que seas periodista o te dediques a otra cosa. Las palabras hablan, el corazón más que la boca y no importa la profesión«.
Hablaba de ser críticos, ¿que hay que mejorar en la Semana Santa de Cádiz?
«Soy de los que insisto mucho en esto porque cuando hablo de respeto no digo solo por parte del gaditano o el público. El respeto tiene que empezar desde dentro y lo que exterioricen las personas que están dentro de una hermandad es lo que va a llegar fuera. Esperemos no tener episodios malos o negativos porque tira por tierra el trabajo que se hace todo el año en una hermandad« ¿Lo dice por El Huerto? »A todos los que somos cofrades y creyentes, más allá de lo religioso, es un puñal que tenemos clavado y por mes o semanas que pasan sin solución es una herida que no para de sangrar«.
Hay quien dice que no hay cofrades en Cádiz
«En Cádiz hay muy buenos cofrades y para los que ven el Carnaval como el enemigo es un error. Se puede convivir perfectamente con el Carnaval, lo que es inevitable saber que el Carnaval tiene una fuerza muy grande pero eso no quita para que tengamos una magnífica Semana Santa. El gaditano tiene que sentir ese orgullo tanto de una fiesta como la otra. Respeto por las tradiciones, un enriquecimiento y por eso hay muchos cofrades en la ciudad y grandísimos.
Los pilares de su pregón
«Será una mezcla de verso y prosa pero sobre todo con unos valores que he entendido desde que estoy metido en el mundo de las cofradías y que muchas veces no están en el día a día. Todo eso unido a mis vivencias personales, recorando a muchos amigos y lo importante es que todo se va a plasmar en un sentimiento que voy a tener que controlar. Va a ser un pregón de Cádiz, por Cádiz y para Cádiz. Un pregón con mis valores, mi análisis, pero siempre con Cádiz por delante«.
¿Se imagina ya en el Falla?
«No me imagino aún en el teatro, lo que si mi imagino es escribiendo y dándole vueltas al pregón. Es curioso porque he vivido muy cerca del Falla durante muchos años, he estado en el teatro en pregones, también en el Concurso de Agrupaciones, pero en el escenario nunca he estado».
¿Cómo serán esos ensayos?
«Estoy hablando con mi Junta de Gobierno para buscar un lugar donde ensayar el pregón. Quiero acabarlo pronto para ensayarlo mucho, tenerlo muy metido dentro de mí y poder encontrarme conmigo mismo. Ahí y en ese momento tendré que seleccionar los oidos que lo van a escuchar, que espero no sean demasiado críticos».
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