Se inventa que la retuvieron en un coche para robarle en Jerez

Una mujer de 38 años se inventó toda una película de malos en Jerez de la Frontera con la presumible intención de estafar a su compañía de seguros, según ha informado hoy la Policía. La detenida denunció que había sido abordada y golpeada cuando se encontraba en compañía de una amiga por un grupo de hombres en la zona de ocio nocturno conocida como el «botellódromo» de la ciudad. En su relato aseguraba que los agresores habían retenido a su amiga contra su voluntad en el interior de un vehículo para obligarla a que les entregara todos sus efectos de valor.

Sin embargo, los investigadores policiales desconfiaron de la veracidad del golpe denunciado desde el primer momento ya que la versión dada por la supuesta víctima presentaba «serias lagunas e incongruencias». Las primeras sospechas se revelaron como ciertas cuando a medida que la investigación continuaba los policías recogían datos e indicios que «desmentían uno por uno» todos los extremos de la denuncia.

Como final, ante los hechos objetivos y los datos recopilados por los policías, la mujer fue detenida como presunta autora de un delito de acusación y denuncia falsa, recogido en el artículo 456 del Código Penal, que está penado con penas privativas de libertad de seis meses a dos años y multas de tres a veinticuatro meses para sus autores.

Comprobación de los hechos

La comisaría ha señalado hoy que el procedimiento a seguir una vez que recibe una denuncia es la comprobación de los hechos así como la posterior investigación a través de los correspondientes grupos de Policía Judicial.   En caso de ser «veraz» se encaminan las pesquisas hacia la detención de los presuntos autores. Si los hechos denunciados son falsos e interesados en dañar a terceras personas o en conseguir un beneficio económico o de cualquier otro tipo se imputa, y en ocasiones se detiene, a los denunciantes, poniéndolos a disposición de la Justicia. Además, la Policía resalta que estas falsas manifestaciones provocan que se «inviertan recursos humanos y materiales en una falsedad», que restan esa dedicación de la investigación de los ilícitos cometidos sobre las víctimas reales.

Este tipo de acciones son cometidas por personas en muchas ocasiones dirigidas a justificar algún tipo de comportamiento o «gastos de dinero» ante sus familiares o parejas o a conseguir indemnizaciones de forma fraudulenta en la póliza de un seguro.