Andalucía registra siete violaciones grupales durante 2022

Ningún experto se atreve a asegurar que las violaciones grupales están aumentando, si bien apuntan a que las víctimas ahora se atreven más a denunciar porque hay una mayor concienciación social y porque hay muchos recursos a su disposición para superar este tremendo golpe, tanto jurídica como psicológicamente.

Durante el año pasado, en Andalucía se han conocido varios casos de 'manadas'. Uno de los primeros tuvo lugar en la localidad almeriense de Pulpí. La víctima, una mujer de 30 años que fue agredida en una playa por tres hombres. En Granada, una joven de 22 años denunció haber sido violada por cuatro hombres que la abordaron al salir de una discoteca y la obligaron a subir al coche. Tras violarla en grupo la dejaron abandonada y malherida en la calle. En Córdoba, una joven de 19 de años denunció haber sido víctima de otra 'manada', en esta ocasión tres jóvenes que además grabaron los abusos.

Son sólo algunos de los casos de violaciones grupales que se han producido en Andalucía, donde la violencia sexual hacia las mujeres sigue creciendo. Así, durante 2022, el IAM ofreció atención psicológica y asistencia jurídica a 406 nuevas víctimas de violencia sexual, lo que supone un incremento del 17,68% con respecto a 2021, cuando fueron 341.

Además, el servicio de asesoramiento jurídico, asistencia legal y atención psicológica a mujeres víctimas de violencia sexual del IAM atendió durante el año pasado a 558 mujeres víctimas de violencia sexual cuyos casos son de años anteriores frente a las 361 de 2021. En los últimos cinco años el número de usuarias nuevas atendidas en este programa del IAM ha crecido casi un 35%.

Las redes sociales, el fácil acceso a contenidos pornográficos a través de la tecnología para usuarios cada vez de más corta edad son algunas de las causas a las que apuntan los expertos para explicar el aumento exponencial de casos de violencia sexual.

Tras los fríos datos estadísticos hay mujeres reales que acuden a estos recursos públicos para denunciar y recibir ayuda con la que afrontar un proceso especialmente traumático. Para ello cuentan con un amplio grupo de profesionales que la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta pone a su disposición a través de este programa específico del IAM.

Desde el IAM explican a ABC que el propósito del programa es dar soporte emocional a las mujeres víctimas de violencia sexual en las distintas instancias, apoyarlas y orientarlas, así como valorar su situación e informarlas sobre las actuaciones precisas para su recuperación y lograr que tengan la asistencia letrada necesaria para que puedan emprender acciones legales, además de movilizar los recursos para instar la reparación del daño producido e impulsar todas aquellas medidas que implican mayor protección y prevención de la victimización previstas en la legislación.

El objetivo: que estas mujeres cuenten con servicios especializados y gratuitos que les permitan afrontar esta situación y, de este modo, facilitar su recuperación tanto física, como emocional y psicológica.

Otro dato escalofriante: baja la edad de las víctimas de violencia sexual. Por ello, el IAM ha reforzado este servicio para prestar atención a chicas a partir de 16 años. Antes esta prestación era sólo para las mayores de 18. «Tenemos un programa de asistencia psicológica a menores de edad porque expresaban a nuestros terapeutas que habían sido víctimas de violencia sexual y hemos decidido incorporarlas a este programa», aseguran en el IAM.

Las víctimas de 12 a 15 años también son atendidas de acuerdo con la valoración que haga el equipo técnico. «Se atienden de manera esporádica si el equipo lo considera necesario y nos coordinamos con Infancia».

La ampliación de esta cobertura empezó a finales de noviembre del año pasado, por lo que aún no hay datos de menores atendidas. Eso sí, desde el IAM se reconoce que en las franjas de edades inferiores hay mayor casuística de violencia psicológica, especialmente de control de las chicas a través de las redes sociales, por lo que ya se está diseñando un protocolo para atención a las víctimas de la ciberviolencia de género.

Para la recuperación de las víctimas menores y más jóvenes de violencia sexual es fundamental trabajar con sus familiares, por lo que también se les presta asesoramiento. Este servicio orientó y asesoró el año pasado a 116 madres y padres. «A veces la víctima no quiere hablar del tema o le cuesta. Los padres también se tienen que preparar ante esa situación, entender qué les ha pasado a sus hijas y cómo les pueden ayudar», añaden.

En relación a la Ley de Garantía Integral de Libertad Sexual, más conocida como ley del 'sólo sí es sí', desde su entrada en vigor hasta el pasado 27 de marzo, el IAM ha atendido 74 solicitudes de revisiones de sentencias en Andalucía, principalmente en Sevilla (27), Almería (18) y Cádiz (10).

«Desde este servicio especializado y gratuito les ofrecemos asesoramiento jurídico y asistencia en el juzgado con la presentación de alegaciones y la documentación pertinente. Además, a aquellas mujeres que lo necesiten también se le ofrece atención psicológica, ya que esta situación genera mucho estrés y ansiedad y, por lo tanto, necesitan ayuda para afrontar esta situación», explica a ABC la consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López.