El polémico bar de la playa de Mónsul «no producirá paellas a tutiplén»

«No da de sí para estar produciendo paellas a tutiplén» . Con esta afirmación el director-conservador del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, Emilio Roldán, ha querido zanjar la polémica suscitada a raíz del anuncio efectuado por la Junta de Andalucía de que el centro de servicios litorales de Mónsul contará con una zona de restauración. Según el responsable del espacio protegido, el bar contará con una cocina de ocho metros cuadrados, diez en la zona de barra y 42 en el salón, lo que otorgan a toda la instalación una superficie de 60 metros cuadrados.

El delegado de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Antonio Martínez, tras hacerse pública la licitación del servicio, lo que levantó un gran revuelo entre las entidades conservacionistas, aseguró que se trataría de una «pequeña cafetería» . Sin embargo, este lunes el responsable de la gestión del Parque Natural, Emilio Roldán, ha matizado estas palabras y ha advertido de que el establecimiento tendrá la posibilidad de ofrecer «comidas frías y calientes» compuestas por los productos «de todo tipo que se pueden ofertar en un bar-restaurante».

Eso sí, el servicio de restauración estará condicionado en todo momento por el tamaño físico de su cocina, lo que «limita bastante la producción de un restaurante» . Además, en el pliego de condiciones se precisa que los precios máximos sin IVA para determinados serán de 2,5 euros para un café solo, 3,5 euros para una botella de agua de un litro, 2,5 euros por una caña de cerveza, 6,5 euros para una copa de licor, 3,5 euros para pinchos y tapas, 4,8 euros por un bocadillo de queso o embutido (50 gramos), 12 euros una ración, 9 euros para platos combinados y 18 euros para un menú compuesto por dos primeros, dos segundos, postre a elegir, bebidas y pan.

Pese a lo que se podría presuponer tras lo manifestado por el director del espacio protegido, el delegado de Medio Ambiente ha aseverado que «bajo ningún concepto» se prevé «rectificación ninguna» o modificación del pliego para licitación del centro de servicios litorales, aunque sí se ha dado órdenes a los técnicos para que «miren con lupa» si resulta «conveniente meter algún tema aclaratorio».