SUCESOS
Obligadas a prostituirse por un euro al minuto en Níjar
Nueve mujeres de diferentes nacionalidades habían sido captadas y se encontraban secuestradas en un club de alterne
«Un euro por cada minuto de sexo», esto es lo que cobraban nueve mujeres que estaban secuestradas en un prostíbulo en la localidad de Campohermoso en Níjar. La Policía Nacional emprendió en el mes de junio la «Operación Minotauro» al tener constancia los agentes de la UCRIF de Almería de que eran obligadas a ejercer la prostitución en contra de su voluntad.
Llegaron a alternar jornadas de 12 horas o incluso más al día siendo sometidas a tratos vejatorios, amenazas y agresiones. En torno al 15% de lo cobrado por los servicios sexuales debía ser entregado al responsable del local , además de 100 euros a la semana como tasa por el uso de las habitaciones.
La Policía ha detenido a un total de cuatro personas que formaban parte de esta trama criminal por trata de seres humanos y otros delitos relativos a prostitución, derechos de los trabajadores y ciudadanos extranjeros. La organización, perfectamente coordinada y con reparto de funciones, estaba liderada por el dueño del club y su esposa , ambos de nacionalidad rumana, quiénes captaban a las mujeres a lo largo de toda España para explotarlas sexualmente.
Durante la apertura al público, la pareja regentaba la barra del local y controlaba a las mujeres para que no se distrajesen y llevaran a cabo un número elevado de servicios cada noche . Fuera de las horas de apertura, no podían salir del local ni tener contacto con el exterior un hecho que dificultaba poder denunciar la situación.
Además, otra persona de nacionalidad rumana era la mano derecha del líder y se responsabilizaba de la seguridad de las chicas , el traslado de estas y del control de los tiempos de los servicios sexuales. La última de las arrestadas es una mujer, que también ejercía la prostitución en el local, pero era la controladora desde dentro para poder solventar cualquier intento de fuga o engaño en la entrega del dinero que tenían que dar al jefe.
En el prostíbulo, que ya ha sido clausurado, intervinieron 1.145 euros, un vehículo de gama alta, varias dosis de sustancias estupefacientes y una libreta que contenía las anotaciones de los servicios de cada mujer y los beneficios que esta generaba a la trama. Asimismo, fueron liberadas nueve mujeres de Rumanía, Colombia y Brasil que estaban sometidas por la organización criminal.