CORONAVIRUS EN ALMERÍA
Las necesidades de las chabolas frente al Covid-19 en Almería
La situación es preocupante porque «el virus ya ha empezado a atacarles y tienen dificultades higiénicas»

El coronavirus sigue avanzado en la provincia de Almería alcanzado prácticamente a todos los sectores de población, sin diferenciar estatus sociales o razas, con casi 2.000 casos activos. La situación es preocupante en colectivos con menores recurs os como son las personas que viven en los asentamientos porque «la pandemia ya ha empezado a atacarles» y a ello hay que sumar las dificultades higiénicas de sus infraviviendas.
Una realidad invisible que requiere de una intervención inmediata. Conscientes de ello, desde Almería Acoge no han cesado de trabajar en zonas como Níjar de forma directa en los poblados de chabolas dónde viven inmigrantes , colaborando con la administración y otras organizaciones, pero también quieren denunciar y reivindicar la situación actual para conseguir entornos más seguros.
«Dentro de los aspectos sanitarios hemos realizado talleres de información y prevención de la covid-19, así como acciones de dinamización comunitaria para la limpieza de los alrededores de las viviendas, reparto de comida y lotes higiénicos» , explican. Hace ya meses reclamaron a las administraciones la necesidad de intervenir de forma inmediata en los asentamientos, garantizando la reubicación de los más vulnerables, proporcionar acceso al agua, desinfección de las zonas, reparto de kits de higiene y alimentación, información y atención de las necesidades básicas.
En Níjar existe alrededor de 34 asentamientos chabolistas con unas 1.342 personas. El Ayuntamiento de la localidad está llevando a cabo un plan que incluye el reparto diario de 13.420 litros de agua, lo que supone una dotación de diez litros por persona y día . Precisamente ha sido este Consistorio el que ha instalado módulos independientes junto a los poblados para que puedan llevar a cabo la cuarentena en caso de ser positivos por Covid-19.
«La gran ventaja es que son jóvenes y digamos que les puede afectar menos o llevarlo con mayor fortaleza. Pero cuando comience la campaña agrícola, con la gran rotación en fincas y la inestabilidad laboral va a ser complicado poder mantener un control sobre los posibles contagios, además de que no cuentan con una vivienda digna», señala el presidente de la Fundación Ceapim y director de Almería Acoge, Juan Miralles.
Entre las acciones que se están realizando las organizaciones en los asentamientos se encuentran clases de español, acompañamiento relacionado con temas sanitarios que está siendo en estos tiempos una de la actividades más complejas e importantes , y realización de talleres de documentación para gestiones administrativas y relacionadas con extranjería. «Poco a poco hemos descubierto que las necesidades más importantes hay que atajarlas en los mismos poblados, por eso nos hemos volcado en esta ayuda, ya que no siempre les resulta sencillo salir de los mismos», relatan desde Almería Acoge.
En la zona de Níjar el equipo de esta organización no ha dejado de trabajar, la situación es compleja y requiere de un esfuerzo extra. Así lo han notado en un aumento de trabajo tanto en el Centro de Día dónde prestan servicio de lavandería, aseo personal, asesoramiento jurídico como en el trabajo en la calle dentro de los propios asentamientos.
En El Ejido, el Ayuntamiento inició la atención en servicios básicos y bienes de primera necesidad para continuar minimizando el impacto de la pandemia. Las líneas del plan contempla n la distribución de agua potable, limpieza y recogida de basura , adquisición y distribución de alimentos y material de higiene, además de otros productos básicos.
En abril, la Junta de Andalucía aprobó unas ayudas extraordinarias para mejorar las condiciones de vida en los asentamientos, unas partidas que deben gestionar los ayuntamientos. En total 1,1 millones de euros para atender a una población de 2.210 personas repartidas en 79 asentamientos que se ubican en la provincia.
Las cifras que da la Junta de Andalucía difieren de las que manejan las organizaciones que trabajan en estos asentamientos, duplicando la cifra oficial. Según Miralles, esto se debe a que la administración entiende por «infravivienda» la que está hecha de cartón, plástico u otros materiales mientras que «nosotros incluimos los cortijos abandonados y en ruinas alrededor de los cuales se crean nuevas edificaciones precarias».
Diferentes colectivos alzaron la voz ante el Ministerio de Sanidad porque entienden que si entra el Covid-19 en estos poblados, la gran mayoría de los inmigrantes morirá. La principal demanda es la instalación urgente de grifos y fuentes para el abastecimiento . Tampoco cuentan con saneamiento público o recogida de basuras. Son infraviviendas construidas con restos de plástico, cartones, alambres y palos, donde no hay baños o aseos, solo colchones viejos tirados en el suelo y una pequeña hornilla de gas donde cocinan a duras penas.
Una de las necesidades cruciales de la población inmigrante en Almería es su alojamiento. Existen graves carencias de vivienda en todas las zonas agrícolas lo que es clave para la integración de estos trabajadores . Además de los asentamientos chabolistas hay barrios que han sido ocupados íntegramente por inmigrantes de forma ilícita, sin control alguno por parte de las entidades locales.
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