investidura de la presidencia de la junta
Ningún partido ve suficiente la marcha de Griñán para apoyar a Susana Díaz
El expresidente de Andalucía anuncia su abandono de la política cuando se daba por hecho que no le iban a nombrar senador autonómico otra vez
No es suficiente. Esa era la tónica general ayer en todos los partidos políticos al margen del PSOE-A sobre el anuncio de José Antonio Griñán de abandonar la vida política . Este hecho facilita pero no despeja en absoluto la investidura de Susana Díaz. Entre otras cosas porque ya se daba por hecho que el expresidente de la Junta de Andalucía, próximo a cumplir 69 años , no iba a volver a ser nombrado senador autonómico otra vez, cuando los grupos parlamentarios propusieran sus candidatos.
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Y los primeros en pronunciarse fueron precisamente los que podrían tener la llave con su abstención (es casi imposibe un sí) para que Susana Díaz sea investida de nuevo presidenta de la Junta de Andalucía: Ciudadanos (C’s) y Podemos.
Ciudadanos se mantiene, por lo tanto, en la misma postura, «votar en contra»
El primero se manifestó a través de su cabeza de lista, Juan Marín, que ayer pasó el día en la Feria de Sevilla. «Si Griñán no está será una piedra menos en el camino, pero no ha habido nada que nos haga pensar que la situación sea diferente», declaró a Ep. ¿Y si en el paquete entrara también Manuel Chaves , imputado también como Griñán por el caso de los ERE en el Supremo? se le preguntó al líder naranja. Misma respuesta: «Abriría un espacio en el que nos sentaríamos a hablar de cuestiones importantes para Andalucía, para acuerdos puntuales», pero no para apoyar la investidura de Díaz, remarcó. Ciudadanos se mantiene, por lo tanto, en la misma postura, «votar en contra». «Así se lo trasladaré a la presidenta en funciones cuando tengamos la oportunidad de hablar», dijo el recién estrenado parlamentario, que tiene pocas esperanzas de poder alcanzar algún acuerdo con los socialistas.
Por otro lado, Marín dijo que la política de pactos no se relajará tras las elecciones municipales del 24 de mayo y ha insistido en que Andalucía no será «moneda de cambio» para alcaldías o gobiernos de otras comunidades.
Decálogo anti corrupción
Cabe recordar que Ciudadanos mandó un decálogo contra la corrupción en Andalucía a Susana Díaz y esta aún no les ha respondido. En él se especifica que no puede haber imputados en cargos públicos y que mientras esto se produzca seguirán votando «no».
En la misma línea se mostró Podemos, que ayer habló a través de Sergio Pascual, secretario de Organización y encargado de negociar con los socialistas la formación de un nuevo Gobierno. Pascual manifestó que los andaluces se «congratularán» de que la persona bajo cuyo mandato se vivió «un desfalco de una magnitud muy importante» deje de ser su representante.
Su retirada es un «avance» pero cree que «no es suficiente porque no renuncia a su acta [de senador] asumiendo su responsabilidad política», apuntó. Sobre las conversaciones con el PSOE-A, Pascual lamentó la postura «maximalista» de los socialistas , que considera «muy dura» y «poco dispuesta a ceder en nada de lo esencial».
Geometría diferente
En ese punto, advirtió de que Andalucía está «a la vanguardia» de lo que sucede en el país, donde «corren vientos de cambio y de entendimiento» y donde los parlamentos «van a tener una geometría diferente a lo que se ha vivido en el pasado que obliga a las distintas fuerzas parlamentarias a entenderse». El responsable de la formación recordó cuáles eran las condiciones puestas por Podemos para desbloquear la posibilidad de que Díaz forme Gobierno. «Estamos dispuestos a que puedan gobernar si hacen señales que indiquen que el voto de Podemos ha servido para que Díaz mire más a los de abajo que a los de arriba», señaló. «Cuando haya propuestas que dificulten, empeoren las condiciones de vida de los de abajo y mejoren las de los de arriba, nos van a encontrar enfrente», concluyó.
El abandono llega tarde
Tampoco hay sorpresas en la reacción de PP y PSOE sobre la esperada marcha que quien tuviera las riendas de Andalucía durante cuatro años. La vicesecretaria de Organización del PP andaluz, Patricia Navarro , declaró que es un «abandono que llega tarde» y que el otro expresidente Manuel Chaves debería «seguirle». Hizo hincapié que tanto Griñán como Chaves tendrían que haber dimitido de cualquier cargo institucional hace mucho tiempo.
En el lado completamente opuesto se manifestó el portavoz parlamentario del PSOE andaluz, Mario Jiménez , que opinó que se trata de una decisión «coherente con su interpretación del momento y con la responsabilidad que cree que tiene que asumir». Jiménez informó de que se volverá a citar a todos «sin líneas rojas y planteamientos que hagan inviable el diálogo». Se mostró asimismo seguro de que van a poder alcanzar «un punto de entendimiento y acuerdo» y explicó que Podemos y C’s ya tienen «más detalles» de la oferta que ellos hacen.
El que no estaba tan tranquilo es el candidato socialista a la Comunidad de Madrid y antiguo ministro de Educación, Ángel Gabilondo , que consideró ayer que, si el caso de los falsos ERE de Andalucía es como parece, es como para «estar verdaderamente inquieto, verdaderamente molesto, para estar sobresaltado».