Hacienda alaba el trabajo realizado en los últimos años por el Ayuntamiento
De «muy productiva» calificó ayer el tripartito de Alicante la reunión mantenida en el Ministerio de Hacienda y donde, según informó el propio Ayuntamiento, se abrió la puerta a la posibilidad de que se puedan proceder al rescate de contratas municipales. Con el condicionante, eso sí, de que el desembolso que se realice en la incorporación de nuevo personal se compense con una restricción del gasto en las áreas de Bienes y Servicios.
Natxo Bellido, portavoz del equipo de gobierno; Sofía Morales, concejal de Hacienda; Esther Rubio y Rosana Arqués, asesoras; Francisco Guardiola, interventor; y Pablo Ortiz, jefe de servicio de Economía y Hacienda, integraron la delegación municipal en Madrid, que propuso cancelar el préstamo de 27 millones de euros del Plan de Ajuste y quedar de ese modo liberado del control económico que mantiene la administración central sobre las cuentas locales. Aunque la decisión se tomará en base a un informe que deberá ser presentado en las próximas semanas, el hecho de que fuera valorado de forma positiva y el reconocimiento del trabajo y la solvencia de los técnicos municipales por parte de los representantes del Ministerio permite confiar en que así sea.
Asunción Sánchez Zaplana, portavoz del Partido Popular en el Consistorio alicantino, manifestó su satisfacción por la reunión. «El hecho de que se produzca constituye una prueba más de que las arcas municipales están saneadas y de que la gestión del gobierno municipal anterior hizo posible remontar y dar la vuelta a una situación que vivieron también muchos ayuntamientos en toda España», aseguró. «La buena situación económica del Ayuntamiento, con un remanente de 11,7 millones de euros del ejercicio anterior permite poder plantearse, incluso, cancelar el plan de ajuste que fue concedido por un total de 26,9 millones de euros», explicó.
Pago a proveedores
La líder popular recalcó que el consistorio alicantino «tiene superávit, en estos momentos, y no hay facturas en los cajones, sino que todas están contabilizadas, siguiendo el trámite normal de pagos». Esto, afirmó, permite que el Ayuntamiento de Alicante sea uno de los de los que paga en el menor plazo de tiempo en toda España y que pueda cumplir los compromisos con los proveedores en una media de 22,1 días. Es decir, 7,9 días por debajo del plazo exigido para hacer frente a las facturas y muy por debajo de la media nacional que está en 38 días. Sánchez Zaplana destacó «el buen trabajo realizado en los últimos años», lo que ha permitido dar la vuelta a una situación común en muchos otros ayuntamientos de toda España.