El Consell cambia la catalogación que impedía los fuegos en el Cocó
La diligencia del gobierno autonómico saliente y los deberes realizados por la concejalía de Fiestas antes de la toma de posesión del nuevo ejecutivo municipal han sacado de un buen lío a Gabriel Echávarri y sus socios del tripartito.
Tal y como informaba ayer ABC, los castillos artificiales que desde hace más de medio siglo se disparan desde la playa del Cocó podían trasladarse al Muelle de Levante –también conocido como zona Volvo– en base a una normativa de protección de suelo forestal contra incendios. De ello así llegó a informar a través de un comunicado en aplicación de la ley forestal autonómica 3/1993 de 9 de diciembre. Norma que, aunque tiene 23 años y hasta ahora se ignoraba su cumplimiento, fue nuevamente impulsada –cabe recordar que fue aprobada por el PSPV de Lerma– debido a la presión de Compromís y Esquerra Unida (formación ahora integrada en Guanyar en el caso de Alicante). Fueron ellos mismos los que se negaron a las salidas propuestas por el Consell para evitar que tradiciones arraigadas en muchos pueblos de la Comunidad, como reducir la distancia de seguridad o recatalogar suelos, se vieran afectadas.
La tensión se apoderó durante toda la jornada del martes tanto del ámbito festero, que veía como el espectáculo pirotécnico se desplazaba de una posición céntrica y por tanto estratégica, como del recién llegado ejecutivo municipal. El tripartito recibió supuestamente un informe favorable de Costas, hecho del que informó discretamente, pero no oficialmente a todos los medios debido a la lentitud con la que están configurando áreas estratégicas como el departamento de comunicación –se prevé que hoy quede finalmente compuesto–.
Sin embargo, y a pesar de que el informe todavía no está en su poder –Rosa de los Ríos, jefa de la Demarcación, lo transmitirá previsiblemente durante el día de hoy–, éste no era definitivo para deshacer el embrollo. La solución estaba en la mano de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, que ayer por la mañana terminó de poner en marcha todos los mecanismos que en una reunión del pasado 8 de junio se habían empezado a activar. Fue en un encuentro a múltiples bandas promovida por Andrés Llorens, y a la que asistieron representantes de la Fiesta, Medio Ambiente y Gobernación. El camino era más directo que todo lo visto anteriormente: subsanar un error cartográfico que calificaba como suelo forestal las playas urbanas del área metropolitana de Alicante, en base a una solicitud formulada por el equipo de gobierno saliente del Ayuntamiento de Alicante.
De esta forma, se resuelve el escollo fundamental, pues la normativa de seguridad autonómica habría prevalecido sobre cualquier otro permiso de uso de suelo.