TODOS TONTOS

«La facilidad de los políticos para tomarnos por memos suele crecer en época electoral»

Si hay algo consustancial al hábito político de cualquier color es la facilidad con la que nos toman por tontos. Sobre este particular, la última constatación la ilustra el líder de Podemos, cuyo partido votó en contra de la resolución aprobada por el Parlamento Europeo sobre la represión de Maduro y la falta de libertades en Venezuela. Pablo Iglesias justificó la negativa de su formación alegando que el texto «dice que Venezuela es como Arabia Saudí», pero la resolución no hace ni una sola referencia al mayor país de la península arábiga.

Digo que nos toman por tontos porque nada tan fácil como buscar y leer la resolución europea para comprobar que el secretario general de Podemos ha mentido: no hay ninguna referencia a Arabia Saudí. Ni una. Ni en las 17 consideraciones iniciales, ni en las 15 peticiones subsiguientes que jalonan el texto.

Lo chocante de la cuestión es que pese a lo descarado del embuste para la mayoría de acérrimos su trola es dogma de fe. Y si el jefe dice que el texto compara al execrable régimen saudí con la excelentísima y purísima República Bolivariana de Venezuela pues así sea. Razones no le faltan al bueno de Iglesias para lanzar tamaña mendacidad con el objeto de desviar la atención, habida cuenta de que no suele ser de buena educación morder la mano que te da de comer.

Esta facilidad para tomarnos por memos suele crecer exponencialmente en época electoral, donde el milagro de la multiplicación de los panes y los peces no pasa de anécdota si se compara con el bombardeo de promesas y cifras mareantes con las que persuadir al personal.

Mientras el desempleo siga en registros desaforados, lógicamente los números a deslizar en campaña tendrán que ver con la tasa de paro. En la Comunidad Valenciana el Partido Popular ya lo ha hecho al prometer nada menos que la creación de 400.000 empleos en la próxima legislatura si logran revalidar su gobierno en las próximas y cercanas elecciones. ¿Quién da más? Se abren las apuestas, señores.