Sólo en Cataluña, decenas de municipios están a punto de declararse en quiebra. Uno de ellos, Moyá, lo acaba de hacer. Sus funcionarios se quedan sin nómina. El nuevo alcalde de Esquerra Republicana busca desesperadamente ayuda para afrontar los 25 millones de deuda de esta localidad barcelonesa de 6.000 habitantes. El consistorio cambió de manos y los vecinos se preguntan qué hizo mal CiU mientras gobernó durante casi 3 décadas. Las calles de Moyá huelen a preocupación. La deuda no puede ser financiada porque sólo es posible si no supera el 75% del presupuesto. El endeudamiento de Moyá alcanza...