Mirar los correos de trabajo desde casa puede ocasionar problemas de salud
El uso de «smartphones» y «tablets» favorece que se trabaje fuera del horario laboral, lo que afecta a la productividad
Trabajar desde casa no es tan bonito y productivo como parece. De hecho, llamar al jefe o contestar el correo electrónico de la oficina desde el sofá de casa podría ser perjudicial para la salud. Esto han determinado varios expertos a raíz de un estudio realizado a 57.000 personas, más de la mitad de los cuales trabajaban fuera de su horario normal, una tendencia en aumento por la accesibilidad que dan los «smartphones» y las «tablets».
Los científicos, cuyo trabajo se publica en la revista Chronobiology International , encontraron que los que trabajaban por la noche y durante los fines de semana eran más propensos a quejarse de problemas de insomnio, dolores de cabeza, fatiga, ansiedad y estómago, además de presentar problemas musculares y cardiovasculares. Incluso una pequeña cantidad de trabajo extra fuera de las horas de trabajo puede conducir a problemas de salud.
«Estos dispositivos inteligentes han creado una cultura 'always-on', donde parece que tienes que estar siempre disponible para trabajar», indicó la experta Anna Arlinghaus, principal autora del estudio. «El tiempo de ocio libre de trabajo es esencial para ayudar al cuerpo a recuperarse, además de que favorece para ser más productivo».
Cuidar de los epleados
Una investigación de 2012 elaborada por la empresa tecnológica Pixmania, encontró que la gente con «smartphone», más del 90% de los trabajadores de oficina, añade dos horas extra a su jornada laboral, y miran veinte veces más el correo que si no lo tuvieran integrado en el móvil. Para evitar que se vaya de las manos, muchas empresas han empezado a moverse. La compañía alemana Daimler, instaló en todos sus ordenadores un software que elimina automáticamente los emails que entran cuando están de vacaciones. «La idea es dejar que la gente rompa con el estrés y descansen para volver frescos al trabajo», manifestó Oliver Wihofszki, portavoz de la empresa.
Los directivos de Deutsche Telekom acordaron dejar de enviar emails al personal en fines de semana, días de fiesta y por las noches, y en 2011, Volkswagen anunció que sus servidores de internet no reenviarían los correos que entrasen por la noche. Algunos gobiernos han tomado cartas en el asunto. Países como Alemania están estudiando seguir el modelo que Francia presentó hace poco, en el que se impide enviar correos electrónicos a los trabajadores de sectores digtales fuera del horario de oficina.
«Los jefes deberían ser quienes tomen la iniciativa para tratar de cambiar esta cultura de trabajo», añadió Arlinghaus. «Las empresas tienen tratar de hacer mejoras por su cuenta, porque no todos los países implementarán reglamentos como en Francia».