Días de verano en las instalaciones del Zoo para los más pequeños

Un total de 80 niños, de entre 8 y 13 años, podrán disfrutar a lo largo de estas vacaciones de las actividades que, como ya va siendo habitual, el parque Zoológico de la ciudad ha organizado de cara a los próximos dos meses. Este programa se centrará en un taller de carácter semanal donde los más pequeños de la casa podrán conocer de primera mano la zona más desconocida de este parque, además de tener trato directo con determinadas especies que habitan en estas instalaciones. De esta forma, dar de comer a los animales, limpiar sus jaulas o ver cómo se recuperan de sus correspondientes lesiones serán buena parte de los atractivos de este educativo proyecto.

«Cada vez son más las familias que deciden apuntar a sus hijos a esta experiencia, que sin lugar a dudas les enriquece en muchos aspectos», como indicó la delegada de Medio Ambiente, Teresa Vega. Y es que hay que destacar que, desde que se crearan por primera vez estos talleres, cada verano son más los menores que piden a sus padres vivir estos días en el Zoo.

Todas y cada una de estas actividades han sido diseñadas para fomentar una conciencia de respeto y sensibilidad con respecto al patrimonio natural existente, un objetivo necesario de alcanzar.

De entre todos los actos que llevarán a cabo los niño, tal vez los que hayan tenido mayor acogida hasta la fecha han sido las dos noches que éstos pueden pasar a modo de acampada en las instalaciones jerezanas. Este verano está previsto que los días 28 de julio y 25 de agosto sean los que acojan esta experiencia que da a conocer la vida de los animales del Zoo cuando cae la noche.

Una vida muy distinta en muchos casos ya que en el parque, como en cualquier medio natural, existen dos tipos de animales: los diurnos y los nocturnos. Al pasar la noche en el Zoo es más fácil conocer de forma un tanto más directa esas especies que desarrollan la mayor parte de su actividad una vez que se ha puesto el sol.

Desde el propio parque y Genatur, empresa patrocinadora de este evento, se anima a los padres a que «acerquen a sus hijos hasta una zona de Jerez que esconde misterio y belleza».