Demasiado riesgo
Actualizado: GuardarTodo depende de la pe-lotita. Si entra, cualquier análisis previo sonará ridículo, pero la sorpresa Oli presenta mu-chas contradicciones. Nadie discute su carisma honesto y entregado, su predicamento entre los cadistas, pero también es imposible negar que la elección ofrece muchos riesgos, tantos, que se antoja osada. Nunca ha ocupado un banquillo y debuta en Segunda con el reto -eso dijo el presidente- de ascender ya, en su primera temporada. Además, no parte de cero, impide abrir una nueva etapa porque, inevitablemente, como todo ser humano, arrastrará filias y fobias en el vestuario tras tres años de convivencia. No podrá evitar ser juez y parte. Ayer, compañero. Hoy, jefe. Sin pausa. Sin anestesia. La sorpresa suena, finalmente, a continuísmo de todo, lo mucho bueno y lo poco malo, del dúo Benito-Muñoz. Resulta complicado esperar ideas frescas, exigencias distintas... Pero si subimos, habrá que tragarse todo esto. Ojalá.