Tráfico plantea sustituir las penas de prisión por trabajos sociales
Actualizado: GuardarLa Dirección General de Tráfico (DGT ) proyecta incluir en la reforma del Código Penal en materia de seguridad vial una cláusula que permita a los conductores sustituir penas de prisión por trabajos sociales. Las «prestaciones sociales sustitutorias» -como se conocerán legalmente-, tendrán una finalidad reeducativa, ya que obligarán al infractor a trabajar durante un tiempo aún por determinar en asociaciones de víctimas, colaborar con la Cruz Roja o asistir a minusválidos por culpa de la carretera. A estas penas sustitutorias se podrán acoger personas sin antecedentes penales o cuyas condenas sean inferiores a los dos años.
La nueva ley que promueve la DGT, el ministerio de Justicia y la Comisión parlamentaria sobre Seguridad Vial prevé un endurecimiento de las sanciones en casos de exceso de velocidad, tasas de alcoholemia significativas o circular sin permiso de conducir, ya sea porque el delincuente carezca de carné o se haya quedado sin los puntos del nuevo permiso que entrará en vigor el 1 de julio.
El director general de Tráfico, Pere Navarro, consideró que estas medidas alternativas tienen como finalidad ayudar a la reeducación de los conductores y «liberar» el trabajo de los jueces «para dar coherencia al sistema» y adecuarlo a otros países europeos. En Francia, Reino Unido, Irlanda o Países Bajos, por ejemplo, «han tenido buenos resultados», recordó Navarro durante la presentación del congreso internacional La sociedad civil ante el reto de la seguridad vial, que tendrá lugar la próxima semana en Madrid.
Muertes evitables
Tanto Pere Navarro como los representantes de la Asociación para el Estudio de la Lesión Medular Espinal (Aesleme) -una de las principales consecuencias de los accidentes de tráfico-, incidieron en que este tipo de normas iban dirigidas sobre todo a los conductores «multireincidentes», personas que, según el director de la DGT, «desprecian todas las medidas de seguridad». Navarro confía que estas medidas haga recuperar la sensibilidad vial de estas personas. El director de la DGT se refirió también a los «avances significativos» que se han producido en los últimos diez años con respecto a los accidentes mortales de autocares, aunque reconoció que las circunstancias del último siniestro en Madrid, cuando siete marroquíes murieron, «les dejó helados».