El debate más abierto
Actualizado: GuardarMe asombra el debate de la permanencia del Cádiz en Primera porque no hay tema que genere tanta participación como este. El pasado domingo de Gloria ha dado un vuelco en las previsiones de los aficionados que hacían sus cuentas y se planteaban un futuro muy negro y complicado. Sin embargo, los tres puntos logrados ante el Zaragoza en la Romareda han cambiado las sensaciones con respecto al devenir del equipo de Espárrago.
A mí me ha pasado. Trataba de no entrar en el debate por aquello de que aún es pronto. Porque la pregunta de si el Cádiz se salvará ronda las cabezas de todos los seguidores amarillos desde que comenzó la Liga allá por finales del caluroso mes de agosto. Sin embargo parece inevitable intervenir en los comentarios. Y ahora tengo que reconocer que mi percepción ha cambiado. Ahora ya al Dépor no lo veo tan Superdépor ni pienso que los equipos de Caparrós sean tan complicados. Ni creo que los nuestros tengan mucho que envidiar a los Duscher, Víctor... La preocupación está en la calle, en las conversaciones de todos. Cada gaditano aporta su visión a la situación del equipo. En cualquier lugar. El otro día, en el supermercado, una mujer preguntaba por los partidos que le quedan al Cádiz y en medio segundo se iniciaba el diálogo en el que intervenían todos los que estaban alrededor. Se percibía un nuevo entusiasmo en el tono de la charla porque un triunfo da pie a todo tipo de comentarios optimistas. Muchos incluso vaticinaban una victoria en el Camp Nou. Casi nada.
El calendario se ha consumido y no me he dado cuenta. Después del último partido he empezado a creer que nos queda mucho por ver hasta el 14 de mayo. Lo que sucede es que en realidad sólo quedan cinco partidos para que se cierre una discusión que, aunque no queramos, está llena de incertidumbre porque es fútbol y además se trata del Cádiz.