Sociedad

Lydia Delgado echa el cierre a Cibeles 2006

La diseñadora catalana presenta en Madrid una rica colección entre el romanticismo y la vanguardia

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La catalana Lydia Delgado puso el broche de oro de la 43 edición de la Pasarela Cibeles con autoridad. Su colección estuvo a la altura de las expectativas creadas por su presentación en el salón madrileño, donde sólo estuvo una vez, en sus inicios. Esta segunda entrada fue rotunda, confirmando su merecido prestigio, con una colección rica en todos los detalles que se movió entre el romanticismo y la vanguardia.

La artesanía de los complementos precisos que adornan las prendas es uno de los fuertes de esta diseñadora. Ennoblece el vestuario, bien con aplicaciones esmeradas en las mangas o con flores superpuestas, a base de los pétalos cosidos uno a uno en faldas y abrigos. Domina el negro combinado con marfil, el rojo cereza, con apuntes en rosa o violeta.

Blusas de muselina, de lunares, combinados con pantalones que imitan a los que usan los jinetes; abrigos de lana de saco con botones hechos a mano e incrustaciones metálicas, perfectos para acompañar con jeans elásticos para quitar rigurosidad. Todo un recital de buen gusto, imaginación y diseño de alta calidad.

Aires andaluces

Abrieron la mañana los peleteros José Luis Aznárez y Olga Ríos. Ambos demuestran que esta especialidad está al día, que renueva sus diseños y tecnifica las pieles, con astracanes o visones raseados de delicado tacto. Carmen March y Juanjo Oliva demostraron que los creadores jóvenes maduran. Ambos colaboran comercialmente pero presentaron por separado sus colecciones.

La primera juega con los volúmenes en abrigos y vestidos de noche, aunque estos, preferentemente en terciopelo, llegan a pegarse al cuerpo o se ciñen con un cinturón. Juanjo Oliva es otro de los nombres recientes que pisan fuerte. Titula su colección Eva y rinde un homenaje a la mujer femenina, que puede ser delicada, envuelta en unos vestidos crema en raso de lana con superposiciones y cortes originales en las mangas.

Aires andaluces

La cordobesa Juana Martín era esperada por un público entusiasta tras su exitoso desfile de la pasada temporada. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y la alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, no se perdieron detalles en estos aires del sur. Sigue utilizando los volantes, colores muy vivos, con abundancia de verdes, y un denim sofisticado con incrustaciones y brillos.

También debutó la castellano leonesa María Lafuente, que recreó un mundo de hadas. Una apuesta romántica con dominio de estampados en verde y granates. A destacar faldas de visón raseado en verde y rojo. La alemana Anke Schöder hizo una apuesta barroca, con mucho color, aplicaciones de lentejuelas y pedrería, con faldas a base de godés que dan movimiento a la prenda.

Por último, el bilbaíno Carlos Díez siempre deja su sello rompedor, esta vez a caballo entre lo gótico, lo roquero y lo punk. Domina el negro, en prendas de charol y jeans elásticos pegados. Ha estampado esta vez con peculiar cara en una línea de prendas, en un gesto de ego que el mismo reconoce.