Un desembarco frustrado de hachís provoca una cadena de arrestos en Barbate

La Guardia Civil abortó en la madrugada de ayer una nueva entrada de hachís por la costa gaditana. El alijo se estaba produciendo en una playa entre Zahara de los Atunes y Barbate, sobre las cinco de la mañana, cuando los agentes del puesto barbateño del Instituto Armado, entraron en acción.

La actuación policial siguió el patrón de otras operaciones desarrolladas a pie de playa. Una embarcación semirrígida, con un motor de 60 CV, arribó a un punto del litoral de la Janda, para descargar los fardos de hachís que previamente habían sido recogidos en la costa marroquí.

Durante el traslado de los fardos desde la embarcación a los vehículos que estaban apostados en la zona, los agentes del Instituto Armado interrumpieron el proceso. Todos los puntos (personas que se dedican a la vigilancia) y los que estaban descargando la mercancía salieron huyendo abandonando gran parte de la mercancía y la embarcación que había servido para introducir los estupefacientes.

Los agentes lograron detener a uno de los participantes en el alijo y además recuperaron cerca de 900 kilos de hachís. La embarcación fue requisada y llevada al depositario oficial. Este periódico pudo saber que el detenido se trata de un vecino de Barbate, mayor de edad y que no se trata de un narcotraficante habitual de la zona.

Pese a que sólo una persona había caído en la intervención policial, los agentes habían logrado identificar a varios de los presuntos narcos que habían colaborado también en el alijo. De esta manera, la Guardia Civil realizó una batida por Barbate durante las horas siguientes.

Gracias a los detalles que habían recopilado durante la madrugada, los agentes fueron localizando a otros colaboradores. Así, este periódico pudo confirmar al cierre de la edición, que ya habían sido detenidos ocho vecinos más de Barbate. Fuentes consultas explicaron que la mayoría de los arrestados son personas contratadas por los narcotraficantes, que dirigen los envíos, para que ayuden a introducir los alijos.

La Guardia Civil no confirmó ayer ninguno de estos datos por estar la investigación aún en curso. Es probable que el número de arrestados se eleve. La actividad frenética en las playas de Barbate parece que ha bajado de intensidad en los últimos meses, en lo que a narcotráfico se refiere. Fuentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado aseguran que la localidad barbateña ha perdido su posición predominante como puerta de entrada del hachís africano. El punto más caliente del litoral en estos momentos es Conil, señalan estas mismas fuentes, donde hace unos meses se desarticuló unas de las principales organizaciones de narcos locales, a la que se le relaciona con la introducción de unas 30 toneladas de estupefacientes a lo largo de un año.

La presión policial sobre Barbate ha hecho que las organizaciones busquen zonas menos vigiladas.