Francia espera poder llevar a Irán ante el Consejo de Seguridad, pese a sus amenazas
Pretende que la ONU dé "una respuesta firme, unida y rápida" para mantener la "credibilidad" del multilateralismo en la no proliferación
Actualizado: GuardarFrancia confía en que la reunión del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) del 2 de febrero permita elaborar un informe sobre la actitud de Irán que sea llevado ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Jean-Baptiste Mattéi, confirmaba hoy que su país mantiene contactos con los otros cuatro miembros del Consejo de Seguridad de la ONU con vistas a la reunión que mantendrán el lunes próximo en Londres y en la que también estará presente Alemania. Ese encuentro hará posible preparar la Junta de Gobernadores del OIEA, que se celebrará el 2 y el 3 de febrero y que abordará la decisión de Irán de continuar con su programa de investigación nuclear.
La pretensión francesa es que la comunidad internacional dé "una respuesta firme, unida y rápida", por considerar que va en ello "la credibilidad de nuestro régimen multilateral de no proliferación", según el portavoz diplomático. Por eso se ha declarado favorable a "un informe del OIEA al Consejo de Seguridad de la ONU que permita reforzar la autoridad del Organismo".
Por su parte, el secretario del Consejo Supremo de Seguridad iraní, Ali Lariyani, amenazaba hoy con proceder al enriquecimiento de uranio a nivel industrial en caso de que su programa nuclear pase a debate en el Consejo de Seguridad de la ONU. Asimismo, el jefe de la delegación iraní en las negociaciones con la troika europea (Reino Unido, Alemania y Francia) señalaba que su país desea una "solución negociada" de la crisis en torno a su programa atómico, pero "suspenderá todas las moratorias en el ámbito nuclear si prosiguen las presiones políticas". "Si la Junta de Gobernadores ejerce presión política sobre el Organismo para que transmita nuestro dossier a la ONU, será un acto poco útil para la paz y la seguridad en la región" y "en tal caso, nuestra actividad no se limitará a las investigaciones científicas, sino que procederemos a enriquecer uranio a nivel industrial".
Lariyani añadía que, según las decisiones del Parlamento iraní, el Gobierno de Teherán también se verá "obligado a suspender el cumplimiento de todas las moratorias" y del protocolo adicional al Tratado de No Proliferación nuclear (TNP) concertado con el OIEA. Por otra parte, destacaba que los expertos del OIEA actualmente realizan inspecciones en Irán de sus instalaciones nucleares y afirmaba que Teherán aboga por la reanudación de las negociaciones con la troika europea y con Rusia "sobre determinados asuntos".
Propuesta rusa
En lo que atañe a la propuesta de disuasión formulada por el presidente de Rusia, Vladímir Putin -la creación de centros internacionales de producción y comercialización de combustible nuclear, incluido el enriquecimiento de uranio, bajo un estricto control de la comunidad mundial-, el jefe del Kremlin ha subrayado que tales centros "deben funcionar bajo control del OIEA" y ofrecer sus servicios "de forma indiscriminada" a los países que necesiten combustible para sus centrales atómicas, según Interfax.
La iniciativa de Putin recoge una propuesta de la Agencia de Energía Atómica rusa, Rosatom, para impedir situaciones como la actual crisis en torno al programa nuclear de Irán al garantizar a cualquier país combustible para sus plantas atómicas y, al mismo tiempo, evitar suspicacias sobre su posible uso con fines militares. A nivel bilateral, Moscú ya ha propuesto a Teherán crear en territorio ruso una empresa mixta de enriquecimiento de uranio para los reactores nucleares que Rusia ayuda a construir a Irán, y Putin ha querido ampliar esta iniciativa a escala internacional.