Un pobre San Fernando saca un punto inmerecido de La Juventud

El Xerez B empató a un gol en la Juventud ante un invicto San Fernando, en un partido en el que los locales dominaron de principio a fin y fue muy superior a su rival, que ayer estuvo bastante espeso en ideas y ocasiones.

La primera mitad, a excepción del gol, tuvo tan sólo una ocasión clara para cada equipo. El partido que a priori se esperaba de máxima expectación defraudó en los primeros cuarenta y cinco minutos. El San Fernando que llegaba como líder de la categoría y con su casillero de derrotas invicto desplegó un juego que dejó muchas brechas abiertas. No hilvanó ni una sola jugada de peligro y su juego no fue fluido en ninguna parcela del terreno de juego.

En contra tuvo a un filial xerecista que plantó cara al conjunto isleño. Con Ramón por banda derecha los hombres de Luna lo intentaban una y otra vez. En la medular del campo, con Juan Carlos como principal revulsivo movieron la pelota con criterio. Sin embargo, algo que ya es habitual en la Juventud volvió a aparecer. Los nervios esta temporada parecen ser un fiel acompañante del Xerex B, cosa que no le está dejando desplegar su mejor juego. Con esto, en un robo de balón tonto de Ángel a veinte metros del área, un balón sin aparente peligro fue conducido por el jugador de la Isla y a diez metros de la frontal del área enchufó un derechazo raso que se fue al fondo de la portería. Javi Romero quizás pudo hacer algo más por despejar el cuero pero el cero a uno subió inevitablemente al marcador. Con muy poco el San Fernando se puso por delante en el marcador y esperó a dormir el encuentro sin más, sin intentar jugar al fútbol.

Antes en el minuto 15, Víctor para el conjunto isleño tuvo una clara ocasión sólo ante el meta xerecista, pero su disparo demasiado cruzado se marchó fuera. Para el Xerez, la ocasión llegó en el 25 por medio de Ramón, que tras un magnífico pase de Borja se quedo sólo ante el meta del San Fernando, pero en la definición el balón lo estrelló contra el cuerpo de Wilfred.

Así se llegó al descanso. Ley del mínimo esfuerzo del San Fernando y un resultado que como sucede en ocasiones es injusto.

En la segunda mitad, sí hubo un equipo que quería ganar el partido ese era el conjunto local. Con casta y coraje, los pupilos de Luna saltaron al campo a comerse a su rival (ayer su juego dejó mucho que desear) y pronto empezaron a ver su fruto. A los pocos minutos de la reanudación el colegiado pitó un penalti sobre David Narváez. Borja en el 59 se encargaría de transformarlo y poner de esta forma un poco de justicia en el marcador y en el juego.

Después con la expulsión de Gonzalo, el San Fernando quedó totalmente roto. En los segundos cuarenta y cinco minutos no tuvieron ni una sola ocasión y su rival empezaba a gustarse y a jugar la pelota con criterio. Con Borja, Calero y Juan Carlos moviendo bien la pelota y abriendo a las bandas, el filial xerecista dispuso de las mejores ocasiones para marcar el segundo gol.

El Xerez estaba volcado en el ataque y en ese momento disputaba los mejores momentos de partido en lo que a juego se refiere, pero con ocasiones, la pelota no quiso colarse dentro de la portería. Al final, empate a uno que a merced de lo visto en el campo se antoja injusto para el equipo de asa, mucho mejor plantado ayer en el campo y jugando más que su rival, que sigue sin conocer la derrota.