Johnny Depp afronta su tercer batacazo consecutivo con «Mortdecai»
Tras los fiascos de «Transcendence» y «El llanero solitario», apenas le salva su breve papel en «Into the Woods»
Johnny Depp , el rockero al que «enferman» los actores metidos a músicos, tiene por delante un fin de semana complicado. Se estrena en Estados Unidos «Mortdecai» y las previsiones no son precisamente halagüeñas: según The Hollywood Reporter , todo indica que la película, que costó 60 millones de dólares (unos 53 millones de euros), apenas conseguirá recaudar 10 millones de dólares (menos de 9 millones de euros) en sus primeros días en la cartelera norteamericana.
El golpe, de por sí doloroso, le escocerá aún más a Depp por ahondar en la herida que abrió « El llanero solitario », que fracasó sin paliativos en 2013. Lejos de recuperarse, la siguiente película protagonizada por Depp, « Transcendence », también tuvo un rendimiento decepcionante. En ambos casos, recuperaron por muy escaso margen el dinero invertido. Pobre balance para un actor cuyo caché es de 20 millones de dólares (unos 18 millones de euros). Como pequeño consuelo, el tirón de « Into the Woods », pero en el musical tiene un rol muy secundario como el Lobo Feroz . No es, ni de lejos, «su» película.
En «Mortdecai», afirma THR, el intérprete aceptó rebajar su abultado salario y dejarlo, según algunas fuentes, en la mitad; según otras, incluso en una tercera parte. Lo relevante es que Depp no acaba de encontrar la fórmula del éxito cuando se desmarca de las franquicias de Disney que le catapultaron a la fama mundial. En este su último film (que no llegará a España hasta el 6 de marzo) encarna a un excéntrico marchante de arte a la caza de una pintura que podría contener el código de una olvidada cuenta bancaria de los nazis.
Parece el tipo de papel que va como anillo al dedo a Depp, el mismo que aseguraba recientemente que le «importa una mierda» lo que digan crítica y público de su trabajo. La realidad, no obstante, desmiente tan rotunda afirmación. Porque sus próximos proyectos suponen una vuelta a la zona de comfort, a los papeles que le convirtieron en uno de los actores más cotizados de Hollywood : el Sombrerero Loco y Jack Sparrow.
Al primero volverá a encarnarlo en la secuela de « Alicia en el País de las Maravillas », ya sin Tim Burton en la silla de director, a estrenar en 2016; y al segundo, probablemente su rol más carismático, y el que le otorgó una candidatura al Oscar, en «Piratas del Caribe: Dead men tale no tales», quinta entrega de la franquicia que arribará en 2017. Antes, «Black mass», donde encarna a un gángster con uno de esos cambios radicales de look que tanto le gustan.
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