Beatriz Sestayo: «Nadie en el PSdeG me ha forzado a dejar el Parlamento»

Se multiplican los frentes abiertos para el brazo gallego de los socialistas. Pese a que el reglamento del partido en su artículo 117 es claro al respecto de la ocupación de cargos electos por parte de sus militantes —que se podría sintentizar en la frase «una persona, un cargo»— la candidata a la Alcaldía de Ferrol, Beatriz Sestayo, no tendrá prisa en cumplirlo. Tras el pleno de constitución de la corporación ferrolana , en el que a la socialista le quedó encomendada la tarea de ser teniente de alcalde, los estatutos de la formación indican que debería dejar su escaño en el Parlamento gallego , o se le abriría un expediente sancionador previsto por el órgano de Régimen Disciplinario.

En declaraciones realizadas a ABC, la nueva número dos del gobierno ferrolano descartó ayer a ABC que haya tomado ninguna decisión al respecto y apuntó que «cuando se tome, lo primero será comunicársela a la militancia». Además, también negó que en los últimos días haya sido presionada por ningún miembro de la dirección del partido para que deje vacante su butaca en la bancada del grupo mayoritario de la oposición en O Hórreo.

Según la versión de la todavía diputada, el parón en la actividad parlamentaria debido al periodo estival podría dilatar en el tiempo la toma de una determinación tanto por su parte como por la del partido. Este relato choca en algunos puntos con el ofrecido por el portavoz socialista en la Cámara gallega, José Luis Méndez Romeu , que, además de corroborar que Sestayo no había comunicado su intención de dimitir, apuntaba al 13 de julio, «cuando terminen de constituirse todas las corporaciones municipales», para comenzar a valorar los hechos y plantearse el futuro de la ferrolana. Lo que sí avanzó Méndez Romeu es que «el partido hará cumplir sus normas». En la comparecencia de prensa se le recordó al protavoz que en el caso de Carmela Silva , diputada en las Cortes y teniente de alcalde en Vigo —que también se presume nueva presidenta de la Diputación de Pontevedra—, no se sigue el reglamento. En su respuesta, Méndez apuntó al mismo argumento repetido otras veces desde el partido : el puesto en el Congreso depende de la dirección estatal y el de número dos en la ciudad olívica de la gallega, por lo que no existe el conflicto, una máxima que no sería aplicable al caso de la ferrolana.

Otras fuentes del PSdeG señalan que la problemática con Sestayo es «un tema más» de los que tiene encima de la mesa la dirección socialistas en estos momentos y que todavía no se ha tratado en las altas esferas de la federación gallega. De hecho, desde la formación dicen estar más centrados en «procesos más importantes» como la negociación para conformar el gobierno de los entes provinciales o la coordinación de las acciones en los municipios regidos por el partido.

Entre los más críticos con la situación vivida en Ferrol se encontró el exalcalde de la ciudad, el popular José Manuel Rey Varela que volvió a afear a Beatriz Sestayo el hecho de que quisiese percibir tres sueldos públicos . A los salarios como diputada y teniente de alcalde, se le sumaban los 6.000 euros anuales que le correspondían por formar parte del consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Ferrol- San Cibrao. Después de la retirada de la retribución votada en pleno municipal, el exregidor le recordó que la política socialista es «una persona que estuvo diciendo que había que tener gestos para reducir las retribuciones» de los cargos. Del mismo modo, Rey Varela tachó de «pataleo» su actitud y apostilló que es «poco coherente con alguien que se presentó como adalid de la transparencia».