Diez días de guerra sin cuartel al narcotráfico
Los operativos tutelados desde Galicia arrojan un saldo de 37 detenidos en lo que va de año, entre ellos «O Mulo»
Descabezados. Así han quedado varios de los grupos más activos dedicados al narcotráfico a los que las fuerzas de seguridad han declarado una guerra sin cuartel que, sólo en Galicia, arroja un saldo de 37 detenidos. 2015 se iniciaba con la operación más importante de los dos últimos años. Así fue calificada por el jefe de la UDYCO de la Policía Nacional, Eloy Quirós, no sólo por la cantidad de droga incautada (1.500 kilos de cocaína), sino también por su infraestructura.
El operativo, liderado por la Fiscalía Antidroga de Galicia, tras año y medio de trabajo en la sombra, culminaba con la incautación del pesquero «Coral I», de bandera venezolana, en aguas del atlántico el pasado 5 de enero. A bordo resultaban detenidos sus nueve tripulantes, todos ellos de nacionalidad venezolana, mientras que en tierra se procedía a otros diez arrestos —siete españoles y tres colombianos—, de los que nueve se practicaron en Galicia y uno en Madrid. De estos últimos, ocho están en prisión, entre ellos el cambadés Rafael Bugallo, conocido como «O Mulo» . Una novena persona quedó en libertad con cargos.
Tan solo nueve días más tarde, en una amplio dispositivo policial desarrollado de forma simultánea en las provincias de La Coruña, Lugo y Pontevedra, la Guardia Civil detenía a once personas vinculadas al tráfico de drogas y que presuntamente participaron en un tiroteo en Muxía (La Coruña). Precisamente, Bernardo Ferrío, de 52 años y vecino de la localidad coruñesa, que mes y medio antes había recibido varios tiros por un supuesto ajuste de cuentas, forma parte de la nómina de detenidos. También su esposa y dos hijos de la pareja. Al parecer, la banda había planeado secuestrar a un empresario de Orense y a su familia.
Por su parte, la operación «Rocky», tutelada por el Juzgado de Instrucción Número 2 de Ferrol, daba como resultado en los últimos días la detención de siete personas, todas ellas de etnia gitana, como presuntas integrantes de un clan familiar dedicado al tráfico de drogas. Según confirmaron fuentes de la investigación, cada uno de los arrestados desarrollaba una función determinante a la hora de distribuir las sustancias estupefacientes.
La última de las grandes macrooperaciones llevadas a cabo terminaba este sábado con 47 arrestos de supuestos integrantes de una red dedicada a la importación de droga para su comercialización en todo el territorio estatal. Algunos de los detenidos, sin que se haya podido precisar el número, operaban en Pontevedra.
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