Los refranes más oídos en Galicia
En una Comunidad tan costumbrada a la lluvia como Galicia, a menudo, se dice: «Nunca choveu que non escampara». O lo que es lo mismo: que las malas rachas acaban pasando
Actualizado: GuardarEn una Comunidad tan costumbrada a la lluvia como Galicia, a menudo, se dice: «Nunca choveu que non escampara». O lo que es lo mismo: que las malas rachas acaban pasando
123456«Nunca choveu que non escampara»
Podría traducirse como «Nunca ha llovido que no escampase», es decir, esta expresión se utiliza cuando van mal las cosas, recordando que la situación no puede prolongarse de manera indefinida. Sería como un sinónimo del dicho «No hay mal que cien años dure».
También se dice cuando alguien está muy enfadado, recordando que el enfado se pasará con el tiempo, que como la lluvia, acaba cesando.
«A nosa vaca ten o pesebre en Galicia e os tetos en Madrid»
Este dicho, que traducido significa «Nuestra vaca tiene el pesebre en Galicia y las ubres en Madrid», suele emplearse cuando una persona hace un trabajo y es otra la que se aprovecha de su resultado. Conocido popularmente como un dicho propio de la Comunidad, su origen se encuentra en una cita del escritor gallego Castelao, en su ensayo «Sempre en Galiza», considerado la obra canónica del nacionalismo gallego. Esta es la traducción del verso:
Nuestra vaca tiene el pesebre en Galicia y las ubres en Madrid / Y el que no le da de comer a una vaca no tiene derecha a ordeñarla.
«Amiguiños sí, pero a vaquiña polo que vale»
En la línea anterior de abusar de la confianza, y también utilizando los animales como metáfora, se usa esta expresión: «Amigos sí, pero la vaca por lo que vale». Es decir, este dicho reivindica la distinción entre amistad y negocio, cada cosa por su lado.
«Somos galegos e non nos entendemos»
El «somos gallegos y no nos entendemos» hace referencia a la «rivalidad» que existe entre los propios vecinos. Sin ir más lejos, la gente de Vigo no encuentra mayor placer que rivalizar con la de La Coruña, bien alimentado por una competitividad futbolística -el Dépor y el Celta son rivales máximos en el campo- o bien por pretender diferenciar la provincia del norte de la del sur.
Este dicho, de Juan de Valeyra, también atribuido al Conde de Lemos, resuena desde la Edad Media de norte a sur y de este a oeste de la Comunidad.
«Hay un gallego en la luna»
En clara alusión a la emigración que los gallegos protagonizaron, principalmente después de la Guerra Civil, se dice que «hay un gallego en la luna», porque incluso en la ciudad más lejana aparecerá algún afincado con orígenes gallegos.
Tan popular se hizo esta expresión que el grupo Zapato Veloz compuso, en el 92, la canción «Pandeirada Sideral» cuyo estribillo decía: Hay un gallego en la Luna, Luna / Hay un gallego en la Luna, Luna / Hay un gallego en la Luna / que ha venido del Ferrol.
Ser de los «tiempos de María Castaña»
Ya a finales del siglo XVI y comienzos del XVII, cuando el autor de El Quijote escribió sus «Novelas ejemplares», los tiempos de María Castaña era una frase hecha con la que remontarse a una época antigua.
Los investigadores sostienen que «María Castaña» o «María Castiñeira» fue real y vivió en Galicia hace seis siglos, concretamente en el coto de Cereixa, en lo que sería el actual ayuntamiento lucense de Puebla del Brollón.