NUEVO DECRETO DE ADMISIÓN
La concertada teme que Educación coarte más la libertad de elección de los padres
La patronal recela de la «matrícula equilibrada» de alumnos inmigrantes
Los centros concertados permanecen alerta ante la intención por parte de la Conselleria de Educación de aprobar un nuevo decreto de admisión para garantizar un equilibrio en la matrícula de los alumnos inmigrantes y con necesidades especiales.
El anuncio lo realizaba la pasada semana el secretario autonómico de este departamento , Miguel Soler , durante una comparecencia en las Cortes Valencianas. La justificación es que el desequilibrio existente en la escolarización de este tipo de estudiantes entre los centros públicos y los concertados genera «dificultad» para dar una respuesta educativa a todos los alumnos.
Esta posibilidad ya ha despertado el temor de la concertada y esperan un borrador del decreto para estudiar bien cómo afectará la modificación. Así lo expresa José Manuel Boquet , presidente de la Federación de Centros de Enseñanza de Valencia, quien explica que estos nuevos criterios de admisión podrían llevarse a cabo de dos formas.
La primera, mediante un cambio en la baremación, aumentando la puntuación de aquellos estudiantes inmigrantes o con necesidades especiales. Actualmente, la mayor puntuación (ocho) se otorga a aquellos alumnos que tengan un hermano en el centro y tres puntos más por cada hermano a partir del segundo. La discapacidad superior al 65 por ciento se valora también con tres puntos y con 1,5 si se trata de una discapacidad del 33 al 65 por ciento.
La segunda, a través de la lista de elección de los centros . Las familias hasta ahora podían escoger hasta diez colegios en la solicitud sin ningún criterio establecido. Desde Feceval temen, sin embargo, que en ese listado los padres tengan que introducir obligatoriamente un centro concertado como una de las posibilidades.
Distrito único
«Al final todo desemboca en lo mismo, y es el recorte en la libertad de elección de las familias . El sistema de admisión actual, al igual que el distrito único, funcionan bien, no entendemos por qué se ha de cambiar.
Si es una cuestión de baja demanda en determinados centros públicos, tendría que estudiarse a qué se debe realmente», sostiene Boquet. El presidente de Feceval defiende « priorizar los escasos recursos con los que se cuenta en lugar de entrar en estas cuestiones » e insta a la Administración autonómica a que elimine los barracones de los centros «antes de embarcarse en otros proyectos educativos».
Aulas infantiles
En este sentido, cuestiona también la iniciativa de las aulas infantiles de dos años en colegios públicos y considera que no pueden alcanzar los estándares de calidad conseguidos por los privados. « Los sistemas pedagógicos implantados , la especialización del personal docente o la adaptación de los espacios hacen que sea muy difícil que el sector público pueda llegar al marco de excelencia conseguido por el privado», indica.
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