Herrera: «No quiero a mi alrededor nadie seguro de que va a ganar. Yo estoy inquieto»

Ni por el entorno social, que aún sigue notando las «consecuencias dramáticas» de la crisis y no permiten «la euforia» por una recuperación que ya se nota, y porque tampoco olvida los «disparates y corruptelas» de los últimos años. Ni por el político, con un mapa «diferente y muy fragmentado», fruto de ese clima social en el que fuerzas emergentes compiten por el poder con las tradiciones. Ni tampoco por el entorno electoral, más en el aire que nunca. Por todo ello, las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24 de mayo no serán unos comicios más. Serán una cita «trascendental de verdad» en la que será necesario un «esfuerzo suplementario» y desterrar más que nunca la «odiosa» leyenda de que Castilla y León es «granero de votos» del Partido Popular. Así lo advirtió ayer su presidente autonómico, Juan Vicente Herrera, ante los suyos en la reunión del Comité Ejecutivo regional que sirvió de pistoletazo de salida para una precampaña y campaña electoral «decisivas como nunca» y en las que llamó a poner «toda la carne en el asador» y «demostrar coraje».

«Hasta el rabo todo es toro», como dijo el propio Herrera, así que nada de vender la piel del oso antes de cazarlo. Esto es, prohibido darse por ganadores sin ver los resultados. «No quiero a mi alrededor nadie que esté seguro, que esté satisfecho, conforme, que entienda que esto se va a ganar por ganarse, porque yo no lo estoy, no lo admito y no lo voy a admitir. No tengo ninguna seguridad, yo estoy inquieto, preocupado, afanado, ocupado, pero desde luego no admito ninguna complacencia», dejó claro el líder de «la principal organización» de la Comunidad y que aspira a seguir siéndolo.

Y es que, aunque la situación no es igual a la de cuatro años atrás, cuando «el viento soplaba a favor», el PP sale «a por todas, a ganar, porque sabe ganar y esta Comunidad necesita que gane» para que «no se interrumpa la línea de mejora». «A por las mayorías para gobernar, y hacerlo con mucha humildad y trabajo», ya que «no nos vale la estrategia ramplona» de hacerlo «a través de un pacto de perdedores», dejó claro el también p residente de la Junta , quien pidió a los suyos «emplearse a fondo, partirse la cara» y hacerlo «desde la cercanía» para «conseguir cada voto, concejal y escaño».

Instó a hacerlo «sin miedo» y, «por supuesto, sin transmitir miedo a la sociedad». Nada de la «leyenda de Pedro y el lobo», pero sí «explicar» lo logrado, aceptando «todos los debates», y advertir también de los riesgos que suponen otros partidos, para así «convencer».

Y es que ésta precampaña que los populares comenzarán de manera oficial el próximo lunes y campaña serán «decisivas como nunca», alertó Herrera. No en vano, si en otras ocasiones la recta final hacia las urnas decidía en torno diez por ciento de los votos, en esta ocasión será rondará el 35 lo que se dilucide, apuntó Herrera haciendo hincapié en la necesidad de volcarse en este periodo. Entre los pocos datos que se manejan, los de las elecciones europeas de mayo de 2014 que, si bien suponen un escenario distinto, sí pusieron de manifiesto la «tremenda» cifra de que un tercio de los votantes del PP en las generales de noviembre de 2011 «nos retiraron su confianza». La esperanza y «oportunidad» para los populares, que el 85% de ellos «se quedó en casa» y «nos está esperando». Por eso, pidió volcarse tanto en el mundo rural como en las clases medias urbanas, de quienes «tenemos que recibir la reprimenda y convencerles de que somos los mejores».

«Es el momento del partido, del gran Partido Popular», una fuerza «ordenada y madura» que «los que crean que es un partido amortizado se van a llevar una sorpresa». El PP saldrá eligiendo «a los mejores candidatos», dijo Herrera, quien pidió a las provincias ser «abiertas» y «generosas» a la hora de escoger rostros también fuera del partido.