LIGA BBVA
El Elche saborea la permanencia
Golea al Deportivo (4-0), un rival directo, y cuenta con ocho puntos sobre la línea de descenso a falta de doce por disputar. A los de Escribá le falta la última nota matemática, mientras la angustia gallega se alarga
El Elche, sobre el césped, dejó a las claras que es equipo de Primera. Roza la permanencia. Solo resta que las matemáticas se lo digan con claridad. No erró en uno de esos partidos en los que está prohibido fallar. Duelo ante el Deportivo, entre rivales directos en ese angustiosa carrera por la permanencia, y practicó un partido intenso, ambicioso, serio y eficaz para lanzar a la lona a los gallegos. Tres puntos vitales para creer con firmeza en mantener la categoría. Ocho puntos tiene ya sobre la línea del destierro a Segunda y quedan doce por disputar. Con 37 puntos saborea el continuar en la máxima categoría con los goles ante el Depor de Jonathas, Lombán, Pasalic y Rodrigues. Los coruñeses, en esa zona peligrosa, todavía tienen mucho que hacer y poco tiempo para ello.
Que Jonathas de Jesús marcó el 1-0 para el Elche ante el Deportivo en el minuto seis queda para la estadística. Lógicamente, el tanto del delantero brasileño sirvió para que los ilicitanos tomasen ventaja, importante además, ante un rival directo. Pero la clave de esa diana fue el aisistente. Jonathas solo tuvo que rematar con facilidad una jugada potente, veloz, con determinación, incluso mágica, de Damián Suárez. El lateral diestro recogió el balón en zona de tres cuartos para ejecutar, primero, sendos autopases con caño incluido ante Luisinho y Sidney. Luego, rocortó ante Lopo. Y desde la línea de fondo en el interior del área deportivista cedió a Jonathas para que éste batiese a Fabricio.
Tremenda la acción de Damián. Fundamental para los de Escribá empezar con ventaja. La acción en todo caso marcó lo que fue el Elche en el primer tiempo. Un equipo tremendamente concentrado y serio. Con vocación ofensiva. Presionando bien. Noqueando al Deportivo, que prácticamente no apuró a Tyton. Mérito para los ilicitanos, haciendo lo que tenían que hacer sobre el césped en una semana convulsa en el club con movimientos en el cuerpo directivo y cambio en la presidencia a causa de la compleja situación económica.
La ambición de los jugadores fue mayúscula. Cierto que la ampliación del resultado a los veinte minutos vino de un penalti señalado por Álvarez Izquierdo en una acción cuanto menos controvertida. Lombán tiró al centro para volver a batir a Fabricio y generar tranquilidad en el equipo franjiverde. Los de Escribá siguieron mandando con buen pulso hasta alcanzar el descanso.
Pareció que salía el Deportivo más intenso con la reanudación del partido. Sin llegar con demasiada solvencia al área de Tyton, sí tuvo un par de intentos firmados por Cavaleiro. Pero era el día del Elche. Y con protagonistas conocidos. Damián avanzó por el costado derecho y habilitó una entrada al área de Jonathas. El chut del ariete en el cara a cara con Fabricio lo ganó el portero deportivista, pero el balón salió hacia arriba en dirección a la portería. Pasalic acabó de rematar la faena y anotó el 3-0.
Los gallegos, duramente castigados, procuraron sacar orgullo y restar al resultado, pues el diferencial particular entre estos dos rivales directos por mantener la categoría lo ganaba el conjunto ilicitano (el Depor ganó en Riazor 1-0 con tanto de Fariña). Así, al poco Tyton ya tuvo que jugarse el tipo para sacar los intentos de Oriol Riera, primero, y de Cavaleiro, luego. El portero polaco se estiró para rozar con el guante el balón lo suficiente y el balón diese en el larguero y no entrase tras un centro chut lejano de Luisinho.
Con una ventaja de tres goles, el Elche guardaba el resultado esperando contragolpear con eficacia. Mientras, el Deportivo, que no se rindió durante algunos minutos, buscó profundizar para restar el resultado. Pero el gobierno del encuentro local, sin balón por momentos, angustió a los de Víctor Sánchez. El equipo de Escribá, con espacios a la espalda del conjunto visitante, gozó de buenas ocasiones para ampliar más el resultado, pero se toparon con Fabricio. Fue Garry Rodrigues el que culminó una jugada personal a la contra para anotar el 4-0 en tiempo de prolongación.