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Cáritas crea un grupo de apoyo para las familias que se enfrentan a un desahucio
Cinco personas, ex empleadas de la banca, inician la próxima semana esta labor para asesorar a los afectados e incluso negociar con entidades
Jerez Actualizado: GuardarLa crisis no solo entiende del estado del euro, la Bolsa o primas de riesgo cada vez más al alza, sino que también crea estragos en las economías familiares que en los últimos años han visto cómo se desmoronan estilos de vida y se reducen hasta casi desaparecer los ingresos, en unos extremos que en ocasiones no permiten ni hacer frente a la hipoteca.
En organizaciones como Cáritas saben bien de este tema, y así lo ponen de relieve informes como el de las asistencias realizadas por esta institución durante el pasado año en todo el país, un análisis que refleja que las ayudas para cuestiones de vivienda han pasado de dar respuesta a unas 20.000 actuaciones en 2007 a más de 50.000 en 2010, lo que supone que nada menos que el 32% de las cuantías se ha destinado a este aspecto.
A este respecto, el director de Cáritas en Jerez, Francisco Domouso, explica que la mayor parte del esfuerzo en este campo se realiza para apoyar a los que viven de alquiler y tienen deudas acumuladas, o para recibos de suministros (luz, gas, agua, etc.). «Dar una ayuda puntual para hacer frente a un impago de varios meses del alquiler soluciona la cuestión, y las familias pueden evitar los desahucios y luego seguir tirando. Pero cuando lo que se empieza a acumular es una deuda en el pago de la hipoteca todo se complica, porque una aportación concreta no sirve de casi nada», argumenta Domouso.
Sin embargo, sobre todo con el agravamiento de la crisis y el empeoramiento de las condiciones laborales o la finalización de los subsidios, a Cáritas llegan cada vez más casos de familias que piden ayuda para renegociar condiciones de hipotecas o que directamente han recibido ya una notificación de embargo de la vivienda y se enfrentan a la consecuencia más extrema, un desahucio.
Es por eso que en Cáritas Jerez llevan ya tiempo dando forma a una idea que se pondrá en marcha desde la semana que viene y que consiste en la creación de un grupo de apoyo a las familias que se enfrentan a esta situación, un equipo de expertos que «pueda anticiparse al drama del desahucio, que pueda aconsejar a los afectados, indicarles el camino a seguir e ir incluso a negociar con las entidades bancarias o como apoyo», apunta Domouso, que es precisamente extrabajador de este sector de la banca.
Este grupo que se va a poner en marcha estará formado por voluntarios como el director de Cáritas, en concreto cinco personas vinculadas a la banca, que «dedicarán su tiempo y su conocimiento a tratar de aliviar algunas de estas situaciones». «Sabemos negociar con las entidades y asesorar a los afectados, que muchas veces se encuentran desamparados cuando les llega la notificación de embargo, y también podremos evaluar las posibilidades reales de salvar la situación o, si no es posible, al menos acompañar a estas familias que se ven desbordadas por la nueva realidad».
La andadura se iniciará en pocos días, pero este proyecto seguirá creciendo sobre la marcha, ya que en la mente de sus precursores también ronda la idea de buscar convenios con el Colegio de Abogados para el asesoramiento legal, o incluso con equipos de mediadores que faciliten negociaciones.
Sea como fuere, lo cierto es que la iniciativa que surge desde Cáritas en Jerez responde sin duda a una demanda que se está implantando en la sociedad para afrontar un problema que, como destaca el informa anual de esta institución de 2010, no está siendo cubierta en su mayoría por las administraciones o los servicios sociales públicos. Por eso, desde esta organización también se insta a que con urgencia se planifique desde lo público la regulación y la garantía del derecho de acceso a la vivienda.