Jerez

Los trabajadores de Nueva Rumasa, inquietos ante la posible venta

Los sindicatos van a solicitar una reunión con la juez que lleva el concurso de acreedores de las bodegas jerezanas del grupo

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Últimamente todo son sustos para la plantilla de las bodegas jerezanas de los Ruiz-Mateos. Los trabajadores llevan semanas escuchando rumores sobre el inminente traspaso de las empresas de Nueva Rumasa a la sociedad Posibilitumm Business, que ya adquirió el año pasado Viajes Marsans y terminó liquidándola, pero la información llega con cuentagotas.

Como ya publicó LA VOZ a finales del mes de julio, fuentes de toda solvencia corroboraron entonces que las conversaciones entre la sociedad valenciana y el conglomerado de empresas de la familia jerezana estaban muy avanzadas aunque desde Nueva Rumasa insisten en que aún no se ha cerrado ningún acuerdo. Así, el grado de incertidumbre que padece la plantilla es máximo y así se lo hicieron saber ayer a los responsables del Complejo Bellavista. «Los trabajadores están inquietos porque los rumores de la venta llevan tiempo corriendo», explicó ayer el responsable del sector de agroalimentación en Comisiones Obreras (CC OO), Luis Páez.

Tanto es así que los representantes de los trabajadores pidieron en la mañana de ayer explicaciones a los responsables aunque éstos les informaron en los mismos términos: aún no se ha firmado ningún acuerdo con Posibilitumm Business. «Estamos preocupados, no sabemos lo que va a ocurrir», dijo por su parte la secretaria de la Federación de Agroalimentación de UGT, Francisca Romero. La inquietud viene, en primer lugar, por la incertidumbre y, en segundo, porque si finalmente la empresa valenciana aterriza en las bodegas jerezanas, «no sabemos con qué intenciones van a venir».

¿Mantenimiento?

Conocida como una entidad liquidadora, Posibilitumm Business tiene también la opción de reflotar las empresas que adquiere. «Si llega una empresa que apuesta por el mantenimiento de la actividad económica en las bodegas jerezanas, bienvenida sea», dijo Romero, aunque desconfiando de esas buenas intenciones.

Ante esta situación, los sindicatos CC OO y UGT (ambos integrantes del comité de empresa) han acordado solicitar un encuentro a la juez del Juzgado de lo Mercantil Número 1 de Cádiz, Nuria Orellana, y a los administradores concursales para pedir información al respecto. Dada la situación del concurso de acreedores -antigua suspensión de pagos- de la mayoría de las empresas implicadas, la operación requiere de la autorización judicial para llevarse a cabo.

Tras las explicaciones verbales de ayer, el comité de empresa solicitará formalmente un encuentro con la dirección de la bodega para conocer más detalles al respecto.

El ERE temporal

Otra de las fuentes de preocupación de la plantilla pasa por la aplicación del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que «se tiene que empezar a aplicar ya mismo», apuntaron los sindicatos. De hecho, «hay que reunirse para ver cómo se va a poner en práctica». En concreto, en la bodega emblema de la familia Ruiz-Mateos se han aprobado dos ERE, uno extintivo para 32 empleados, mayoritariamente técnicos y comerciales; y otro temporal para el resto de la plantilla, 106 personas. El ERE temporal no podrá exceder de un año y la empresa completará en un 10% los sueldos de los empleados para que en ese tiempo cobren el 80% de los salarios.

La última firma de los Ruiz-Mateos que entró en concurso de acreedores fue la Bodega Cavas Hill, elaboradora de cavas y de vinos amparados en la Denominación de Origen Penedès. El auto de declaración del concurso, firmado en el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Barcelona, tiene fecha de 7 de julio.

En el Marco de Jerez, están en proceso voluntario de suspensión de pagos las entidades Zoilo Ruiz-Mateos, Unión de Grandes Bodegas, Bodegas Valdivia, Bodegas Teresa Rivero y Complejo Bodeguero Bellavista. Estas empresas acumulan un pasivo de 231 millones de euros, y entre sus principales acreedores figuran Hacienda y Banco Santander, así como la cooperativa sanluqueña Virgen de la Caridad. La peculiaridad de estas empresas de la comarca es que la familia propietaria, según resolvió la juez, sigue conservando la facultad de administración y disposición del patrimonio de las sociedades, dado el carácter voluntario de la solicitud.