Un incendio siembra el pánico en un bloque de la avenida de Europa de Jerez
Una mujer se rompió una pierna al tirarse desde su terraza a un colchón en la calle cuando las llamas entraron en su vivienda
Actualizado: Guardar«Creía que iba a perder a mi mujer y a mi hijo». Con esta espeluznante declaración se expresó ayer José Carvalho, residente del edificio Congreso y aún conmocionado por el incendio que se registró a media tarde en el citado inmueble. José, con el miedo en el cuerpo, relató a LA VOZ cómo sobre las 18.00 horas su esposa lo llamó por teléfono para contarle que se había originado un fuego en el primero, dos pisos más abajo de su vivienda, y que el humo había penetrado en ésta.
«Ella me llamó muy nerviosa diciéndome que no podía respirar y yo le dije que se tapara con un paño húmedo y me fui corriendo para allá». Cuando el marido llegó, ya que no podía subir a través de la humareda decidió intentar entrar en el piso por el garaje, lo que también resultó imposible. Finalmente, los bomberos rescataron a la mujer, a su bebé de cuatro meses y a su perro con un vehículo grúa y se reunieron con su pareja y con los vecinos que habían tenido que abandonar a toda prisa el edificio, por lo que a algunos incluso apenas si les había dado tiempo a vestirse.
Como explicaron desde el Parque de Bomberos de Jerez, alguien dio el aviso a las 18.13 horas, cuando una señora se encontraba gritando muy nerviosa en el balcón del primer piso del edificio y desde fuera se podía comprobar cómo las llamas campaban a sus anchas en éste. Cuando los efectivos se desplazaron al lugar de los hechos, trabajadores de la tienda de colchones que está debajo del bloque habían colocado uno de estos artículos para que la mujer se tirara y así lo hizo.
Como resultado de ello, la vecina, de 51 años, se rompió una pierna y tuvo que ser atendida por los servicios sanitarios. El resto de los vecinos fue evacuado del edificio por la Policía Local, y dos de ellos tuvieron que ser asistidos también por los efectivos del 061 por inhalación de humo. Se trata de un hombre de 33 años y un niño de cuatro, cuyo estado de salud no reviste gravedad.
El fuego, como informaron las mismas fuentes, se originó en el salón del primero por causas que se desconocen y cuando llegaron los bomberos, éste estaba calcinado y las demás habitaciones se encontraban anegadas por el humo. Para sofocar el incendio, emplearon 2.500 litros de agua y se valieron de cuatro vehículos.
En las demás viviendas también penetró el humo, aunque no causó apenas destrozos. Como recordaron desde el Parque, en estos casos lo mejor es encerrarse en el cuarto más lejano de donde procede el fuego y dejarse ver en una ventana o una terraza, hasta que los bomberos procedan al rescate. Si el incendio no se ha registrado en la vivienda de uno, se recomienda no salir de la misma y menos ir a zonas comunes, a no ser que así lo recomienden los profesionales.