«Si quieren conseguir que me acobarde, que sepan que no lo van a lograr»

«Pilar y Morales, pagar o morir. Nuestro club vale más que tu vida. Consejo, dimisión». De esta manera amaneció ayer el estadio Municipal de Chapín. La tensión que vive el xerecismo ha llegado a un extremo tal que en la madrugada del pasado lunes Joaquín Morales, presidente del Deportivo, fue víctima de actos vandálicos en su domicilio de Dos Hermanas, en la Urbanización de La Motilla. El máximo mandatario azulino fue el protagonista de unas pintadas donde se le amenazaba («Morales paga o muere») y responsabilizaba de la delicada situación por la que está pasando la entidad. Además de recibir pintadas en su domicilio y en el municipal jerezano, el nazareno también sufrió daños en uno de sus vehículos, así como en una empresa propiedad de uno de sus hijos.

Los actos se produjeron a las 02.30 horas aproximadamente de la madrugada del lunes, cuando unos desconocidos se personaron en el domicilio del presidente y realizaron las pintadas en la fachado de su casa. Posteriormente, ya en Jerez, se realizaron las dos pintadas anteriormente citadas.

«Estoy fastidiado»

De todo esto, el empresario sevillano reconocía ayer que se sentía «fastidiado», aunque prometía no rendirse: «Vamos a seguir hasta el final, dando la cara y demostrando que nos vestimos por los pies». Morales confesaba que «la verdad es que esto no es normal, porque toda aquel que ame un poco el deporte y sea un poco persona sabe que esto está mal», y tenía claro que «nadie va a conseguir que Joaquín Morales se acobarde, ni mucho menos. Joaquín Morales va a seguir dando la cara y echándole cojones a esto». Y es que el mandatario se mostraba muy dolido por los hechos y manifestaba que «a mí no me van a acobardar porque nunca he sido un cobarde».

«No son personas»

«Esos que estuvieron anoche en mi casa y me destrozaron el coche ni tan siquiera se merecen que se les llame persona». Morales se mostró duro contra los responsables de los actos vandálicos y comentó que «Lo que tenemos es lo que tenemos y con esta forma de decir aquí estamos nosotros no se llega a nada». El mandatario recordaba que «hace más de un mes dije que había vendido el Xerez y vendido está. Pero qué culpa tengo yo de que no haya llegado el dinero».

Y es que el nazareno aseguraba que «soy la persona que más ganas tiene de salir del Xerez», ya que «mi ciclo pasó porque estoy muy quemado, pero lo que no puedo hacer es quedarme en Dos Hermanas».

Repulsa de las peñas

Juan Carlos Corchado, presidente de la Federación de Peñas, quiso desvincularse de estos actos vandálicos y mostró su repulsa por los hechos: «Queremos estar al margen de este tipo de actos vandálicos. La Federación de Peñas quiere desvincularse totalmente porque una cosa es el tema profesional o de empresa y otra es entrar en amenazas personales».

De hecho, esas amenazas han causado aún mayor preocupación en la afición azulina: «Hoy estoy aún más intranquilo y después de lo que ha ocurrido más que nunca estamos intranquilos con lo que pueda pasar entre mañana y pasado». Por su parte, la Agrupación de Peñas envió ayer un comunicado a los medios en el que mostraba su rechazo por este tipo de actos violentos y manifestaron que «ese no es el camino para salvar la actual situación de nuestro club».

En la jornada de hoy el presidente del conjunto azulino tiene previsto denunciar los hechos a la Policía ya que los hechos fueron grabados por las cámaras de seguridad de la urbanización donde reside en Dos Hermanas.

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