Cerco policial a los presos fugados de la cárcel de Nueva York

La caza de los dos fugitivos que se escaparon de la Clinton Correctional Facility , una cárcel de máxima seguridad al norte del estado de Nueva York , se ha trasladado casi 600 kilómetros al sureste, muy cerca de la frontera con Pensilvania .

Después de más de dos semanas de fuga, Richard Matt y David Sweat podrían haber sido avistados en las inmediaciones de la localidad de Friendship , todavía dentro del estado de Nueva York. Una mujer que conducía su coche el pasado sábado cerca de una vía de tren vio salir a dos hombres de un bosque . Al darse cuenta de que alguien les observaba, uno se escabulló hacia el bosque, mientras que el otro se apresuró a colocarse la capucha de su jersey. Uno de ellos era pelirrojo, lo que concuerda con la descripción de Sweat.

Tras el avistamiento –que la Policía todavía consideraba como «no confirmado»– la localidad se pobló de policías y helicópteros, que han peinado la zona sin descanso el resto del fin de semana. Los investigadores ya habían recibido testimonios, también sin confirmar, de la presencia de los sospechosos el pasado fin de semana en el condado de Steuben , a solo 70 kilómetros de Friendship.

Desde el pasado 6 de junio, cuando se produjo la fuga, las fuerzas de seguridad habían concentrado sus esfuerzos en los alrededores de la prisión, con cerca de 800 efectivos rastreando esta zona cercana a la frontera con Canadá.

Sweat y Matt escaparon de la cárcel a través de agujeros y boquetes en sus celdas y en los conductos de calefacción de la prisión. Al parecer, contaron con la ayuda de Joyce Mitchell, una trabajadora del taller de sastrería del correccional que les facilitó herramientas y que se encuentra detenida.

Sweat, de 35 años, cumplía condena por asesinar a un policía, mientras que Matt, de 48, ingresó en prisión por secuestrar, torturar y mutilar a su jefe . La Policía advirtió a los vecinos de la zona de que los fugitivos, que acaban de ingresar en la lista de las 15 personas más buscadas en EE.UU., son «muy peligrosos».