Syriza quiere juzgar a quienes decidieron los recortes en Grecia

La Coalición de la Izquierda Radical Syriza ha anunciado que, en cuanto conquiste el poder, va a llevar a juicio a los responsables de los más duros ajustes llevados a cabo hasta ahora. El partido presenta la purga como una campaña contra lo que denominan «escándalos políticos y financieros». Pero, para que nadie se llame a engaño, añade que el objetivo de su iniciativa es atacar «la ocultación, impunidad e inmunidad» de muchas enmiendas «promovidas por el gobierno de Samarás». Considera que los programas de ajustes y reformas han traído una «injusticia generalizada» y que la sociedad griega se merece «transparencia, rendición de cuentas y el esclarecimiento de asuntos que han creado escándalos políticos y económicos».

Los tres primeros juicios irían dirigidos contra los responsables de los llamados «memorandos» (los dos programas de reformas y ajustes del sector público impuestos por la troika para desembolsar el dinero de cada rescate). Asimismo se promoverían acciones en la Justicia contra los responsables del cierre del ente griego de Radiotelevisión (ERT) y del encargo y pago de varios submarinos alemanes para la marina griega (un caso que se vio rodeado por el escándalo). A continuación, se quiere llevar a cabo otros tres juicios más: contra los responsables del Fondo Estatal para las Privatizaciones (Taiped), contra los directores del Fondo de Estabilidad Financiera y contra quienes se encargaron de conceder préstamos bancarios a los partidos políticos.

De llegar a gobernar Syriza y llevarse a cabo estos juicios, podrían llegar a sentarse en el banquillo incluso las más altas autoridades políticas del país, ya que ellos han sido los responsables últimos de los programas de ajuste y liberalización llevados a cabo en estos años. Los más directos responsables de los ajustes son el Presidente del gobierno, Andónis Samarás , su vicepresidente, Evánguelos Venizelos , varios ministros (especialmente los que se encargaron de la cartera de Finanzas, Yorgos Papaconstantinu y Yánis Sturnáras, quien ahora es el gobernador del Banco de Grecia), así como altos cargos de los ministerios de Defensa y Justicia.

Los radicales consideran que gran parte de las medidas del programa de reformas son «antidemocráticas» y «anticonstitucionales» (despidos, reducción de salarios y pensiones y eliminación de distintos tipos de privilegios). Y se han mostrado siempre contrarios a la venta de empresas estatales, por muy deficitarias que fueran. Tal es el caso de los ferrocarriles, de la compañía pública de electricidad DEI, y de parte del puerto del Pireo que en la actualidad se encuentra en manos chinas.

La responsable de Syriza encargado de llevar a cabo esta purga sería con toda probabilidad Zoí Konstandopúlu, una de las diputadas estrellas de la coalición izquierdista, una de sus militantes más «guerrera» e ideologizada. Zoí, nacida en 1976, es hija de Níkos Konstandópulos, líder de la Coalición de la Izquierda durante varios años y como su padre excelente abogada. Trabaja desde el años 2003 como especialista en litigios penales y en derecho internacional. Fue elegida diputada de Syriza por la circunscripción de Atenas centro en 2012, fue entonces la mas votada en la formación radical. Fue parte también de varios comités parlamentarios relacionados con cuestiones de Justicia, entre ellos el Comité Permanente sobre Instituciones y Transparencia del Parlamento.