Samarás fracasa en su segundo intento por evitar las elecciones en Grecia
Al primer ministro griego le queda todavía una oportunidad para que el Parlamento elija un nuevo presidente y cerrar así el ascenso al pdoer de la extrema izquierda de Syriza
A pesar de su propuesta efectuada hace dos días, el primer ministro Andonis Samarás no ha conseguido la elección de su candidato para Presidente de la República de Grecia esta mañana. En la segunda votación en el Parlamento, en la que el único candidato presidencial, Stavros Dimas, debía obtener doscientos votos de los 300 del hemiciclo, ha visto de nuevo rechazada su propuesta.
La candidatura de Dimas consiguió finalmente 168 votos de los conservadores de Nueva Democracia , de los socialistas del PASOK y de independientes que habían abandonado su partido anteriormente. También votaron a favor dos diputados que han abandonado el partido neonazi Amanecer Dorado. Será el 29 de diciembre cuando se desarrollará la tercera votación, en la que se necesitan solo 180 votos.
Los radicales dan por sentado que en la tercera votación el Gobierno no conseguirá elegir al nuevo presidente y habrá elecciones generales anticipadas en las próximas semanas. Los observadores políticos consideran, por su parte, que Samarás ha demostrado que está abierto a un consenso, mientras que los radicales de Syriza siguen decididos a provocar unas elecciones generales anticipadas que son vistas desde Bruselas como potencial fuente de graves problemas políticos y económicos y que pondrían poniendo en peligro el futuro del rescate griego así como la trayectoria europea del país.
La propuesta llega tarde
Samarás había efectuado varias concesiones para evitar elecciones anticipadas precipitadas a finales de enero o principios de febrero, lo que significaría una muy probable victoria de los radicales. Ofreció adelantar las elecciones para efectuarlas dentro de unos meses pero en el 2015 (en vez de en el 2016) y comenzar la reforma constitucional lo antes posible. Pero no parece que estas concesiones hayan convencido a los diputados necesarios del grupo independiente, de la moderada Izquierda Democrática y de los populistas de derecha Griegos Independientes.
No se descarta que el primer ministro proponga una personalidad distinta para la tercera ronda, en la que aspira a alcanzar los 180 votos necesarios. Sólo se podría obtener esta cifra con todos los votos de los diputados de la izquierda moderada, algo que parece imposible en este momento debido a la postura de su líder Fotis Kuvélis, un antiguo comunista que perdió la presidencia de la Coalición de la Izquierda ante Tsípras. Cuando la Coalición elegió nuevo Presidente en febrero del 2008, Tsipras se impuso con el 70,41 % de los votos frente al 28,67% de Kuvélis.
Escándalo de la compra de votos
La última crisis institucional se ha visto salpicada también por el escándalo de la supuesta compra de votos de diputados. Uno de los parlamentarios del partido populista Griegos Independientes, fundado por un antiguo conservador que se niega a apoyar al Gobierno, denunció que una persona anónima le había ofrecido tres millones de euros a cambio de votar a favor del candidato presidencial. El diputado en cuestión, a la sazón un conocido actor en Grecia había grabado el supuesto intento de soborno. El tema acabó en los tribunales y el juez consideró que no había suficientes pruebas para investigarlo, pero gran parte de la opinión pública está escandalizada con un asunto que consideran síntoma de la debilidad y corrupción de su sistema político.