José Cusí: «Don Juan Carlos está muy bien de salud»
Es el hombre que ha comprado el barco con el que el Rey emérito volverá a las regatas
Durante cuarenta años han surcado juntos las aguas del mar a bordo de la saga Bribón. Han luchado contra las adversidades que se interpusieron en sus travesías, pero también en tierra firme. Muchos se refieren al armador barcelonés José Cusí, de 81 años, como la eterna sombra de Don Juan Carlos. Él prefiere presentarse en cambio simplemente como su gran amigo y confidente. «El Rey es un hombre sencillo con ilusión, entusiasmo y empatía. Ha dejado tantos recuerdos de nuestra etapa en el Bribón... A todas las regatas que voy me preguntan por él» , declara Cusí a ABC.
El gran armador comenzó a participar en regatas en el año 72, cuando conoció a Don Juan Carlos. Al principio navegaban en barcos rivales, aunque gemelos, hasta que se evidenció su afinidad y decidieron aunar fuerzas compitiendo en la misma embarcación. Ganaron muchas regatas juntos y, además, forjaron una gran amistad. Con el Rey no sólo le unen los barcos, sino también su pasión por el tiro al plato, la caza y los perros . Tema de conversación nunca les faltó y su relación se fue estrechando a medida que compartían horas de navegación. El Rey es el padrino de uno de los hijos de Cusí.
Hace cinco años, por motivos de salud, el Rey plegó velas. Se apeó de la alta competición a bordo de grandes barcos y pusieron a la venta el último Bribón. «La edad no perdona a nadie. Tuvimos que dejar de navegar con los Fórmula 1, pero la afición sigue ahí», expone Cusí. Y el momento de reanudar su romance con la vela llegó el pasado mes de septiembre en el Real Club Náutico de Sanxenxo (Pontevedra) a bordo del Acacia, propiedad de Mauricio Sánchez. «Buscamos un barco que tiene nada menos que 80 años, tiene casi mi edad. Participó con él, quedó encantado y quien tuvo retuvo. Llevó el timón perfectamente y ganó la regata» .
En España sólo hay un barco de esa clase y por eso Cusí, junto con Pedro Campos, han comprado en Finlandia un velero del mismo tipo para que Don Juan Carlos vuelva a competir en circuitos de barcos clásicos. «Mi mayor alegría es que Don Juan Carlos vuelva a practicar el deporte que más ilusión le ha dado. Es una gran satisfacción verle con entusiasmo y físicamente muy bien . Para mí es la mejor recompensa que he tenido de la vela», comenta un emocionado Cusí.
Su próxima cita náutica será a mediados de octubre en Sanxenxo. Don Juan Carlos será el patrón del Ian, un «seis metros» construido en 1929, considerado un barco clásico excepcional, valorado en unos 65.000 euros.
Aunque estos barcos no son la Fórmula 1, requieren esfuerzo físico, puntualiza Cusí. «Don Juan Carlos está muy bien de salud. Lleva el bastón por su seguridad. Pero hemos navegado en Gotemburgo y en Galicia y lo ha hecho fenomenal».
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