Fracaso en el matrimonio Affleck- Garner

Tras numerosos rumores, finalmente Ben Affleck y Jennifer Garner se separan. Los actores de Hollywood terminan con una relación de diez años de la que han sido fruto sus tres hijos. Lo han anunciado a través de un comunicado en el que explican que «después de mucha reflexión y una cuidadosa consideración hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos (...)» . Son muchos los rumores que han tenido lugar a lo largo de estos años sobre el matrimonio. Uno de los motivos por los que la relación se ha ido resquebrajando ha sido el problema con el alcohol y el juego del oscarizado actor. Además, Garner ha afirmado en reiteradas ocasiones que es adicto al trabajo y que tiene muchos vicios.

Lo que está claro es que Jennifer Garner solo le ha aportado beneficios en su vida. En distintas declaraciones, Ben Affleck siempre ha hablado de Garner como una persona que le ha ayudado mucho en su vida, llevándole por un mejor camino y guiándole en su carrera. Su matrimonio supuso una estabilización de su día a día tras su ruptura con Jennifer López en el 2004, relación por la que se convirtió en un habitual de la prensa y de los escándalos. Con Garner como pareja, todo lo que ha tenido han sido éxitos, ya que consiguió el Oscar a Mejor Película por Argo en el año 2013. De hecho, en la entrega de dicho Oscar se refirió a su mujer como la persona que le había impulsado a seguir en Hollywood y sobre todo a dar el paso para ejercer de director. Garner ha sido su primera y única esposa por lo que esta separación supondrá un gran cambio en la vida de Affleck.

Según la revista «TMZ», Jennifer Garner se habría cansado de la vida que lleva Ben, ya que en los últimos años se habrían intensificado todas sus malas costumbres. La ludopatía que padece Affleck es conocida, ya que en más de una ocasión han aparecido fotografías en las que se veía como el actor hacía apuestas en diferentes casinos.

Han estado acudiendo a terapia de familia con un psicólogo, pero no ha aportado ninguna solución, por lo que han procedido a poner en marcha los trámites de divorcio , confirmando que han llegado a un acuerdo para educar conjuntamente a sus hijos.