Rihanna, ¿de Benzema a Lebron James?

El enfrentamiento entre baloncesto y fútbol es casi pre bíblico. Los seguidores del primero luchan porque sea tan reconocido como el segundo, y los más futboleros miran por encima del hombro a los que gritan por unos pasos pero no entienden qué es un fuera de juego. Y en medio de todo ello, está Rihanna.

La cantante, cuya lista de amantes no para de aumentar, fue vista en Nueva York la semana pasada disfrutando de momentos íntimos con el jugador del Real Madrid , Karim Benzema. Pero parece que RiRi, como otros tantos mortales, se debate entre jugar con las manos o con los pies. La cantante pagó 37.000 dólares para animar a Lebron James durante un partido de las finales de la NBA. Y ojo, porque según los testigos, apenas había terminado el partido cuando la cantante estaba ya esperando al jugador en los vestuarios.

El partido en cuestión enfrentaba a los Golden State Warrios contra los Cleveland Cavaliers, y mientras el Oracle Arena, estadio donde tuvo lugar el encuentro y casa de Warriors, se levantaba para animar al jugador Stephen Curry, Rihanna utilizaba todo el potencial de su voz para corear el nombre de Lebron James. Normal que todos los espectadores quisieran saber quien era aquella mujer que iba a contracorriente. Y se encontraron a la de Barbados. De hecho, el vecino de butaca de la cantante, Joe Lacob, dueño de los Golden State Warriors, se cambió de asiento por dos motivos: la atención no deseada que estaba recibiendo y el volumen de los ánimos de Rihanna.

La cantante ha demostrado en varias ocasiones que, en cuestiones de amor, poco o nada de le importan lo que digan los demás. Así ocurrió cuando decidió perdonar a su ex novio , Chris Brown, tras la monumental paliza que recibió de su parte, o cómo aviva los rumores de romance con Leonardo DiCaprio con fotos cada vez más cariñosas. Falta saber si en esta ocasión la emoción de Rihanna era fanatismo por el jugador o por el hombre.