Amal Alamuddin luchará por el retorno a Grecia de los mármoles del Partenón
La mujer de George Clooney viajará a Atenas el 13 de octubre y se entrevistará con Samáras para estudiar la reclamación helena
El regreso a la vida laboral de Amal Alamuddin (36 años), actual señora de George Clooney (53), tras su fastuosa boda en Venecia (costó más de 3,5 millones de euros) y su luna de miel en las Seychelles, promete ser sonado. La abogada británica de origen libanés, quien en su día representó a Julian Assange, fundador de Wikileaks; a Yulia Tymoshenko, ex primera ministra de Ucrania, o al ex secretario general de la ONU Kofi Annan, viajará a Atenas para estudiar la reivindicación del gobierno heleno de recuperar los Mármoles de Elgin, las esculturas del Partenón que se se exponen en el Museo Británico .
Se trata de una vieja reclamación de los griegos. Las esculturas fueron trasladadas a Inglaterra a principios del siglo XIX por Lord Elgin, el embajador británico ante la Sublime Puerta (Imperio Otomano). La primera persona en reivindicar la devolución de dichos mármoles fue la actriz Melina Mercuri (1920-1994), cuando en 1982, como ministra de Cultura, reclamó las obras durante una conferencia mundial de la UNESCO.
La implicación de Alamuddin en esta reivindicación se debe a Phedon Papamichael , un destacado director de fotografía de origen griego e íntimo amigo de George Clooney. Durante una rueda de prensa con el actor norteamericano en la presentación de la película «Monuments Men», en el pasado Festival de Cine de Berlín, una periodista griega preguntó al Clooney cuál era su postura sobre la devolución de las esculturas del Partenón que se encuentran en Londres. Este se mostró a favor, así que no tardaron en pedirle ayuda a través de su amigo Phedon. Su esposa ahora ha decidido tomar parte activa en el asunto y, durante su visita a Atenas, se entrevistará con el primer ministro griego, Andónis Samarás.
Una heroína
Phedon ha contado a los medios griegos que cuando Amal le dijo que pensaba viajar a Atenas, le contestó: «Si consigues que los británicos devuelvan las esculturas, te convertirás en una heroína en Grecia. Y te regalarán una isla, como ocurrió con Anthony Quinn» (tras rodar «Los cañones de Navarone» en la isla de Rodas).
Ya se ha confirmado que Amal Alamuddin llegará a Atenas el 13 de octubre en un vuelo directo desde Londres, junto a dos abogados del despacho londinense para el que trabaja, Doughty Street Chambers . Estará acompañada por el presidente de la Asociación Internacional para la Reunificación de las esculturas del Partenón, David Hill, empresario y autor inglés establecido en Australia. En el emblemático y céntrico hotel Grande Bretagne de Atenas ya hay reservada una suite a su nombre.
Al día siguiente, Alamuddin se entrevistará a las diez de la mañana con el primer ministro Samarás y visitará el Museo de la Acrópolis , donde se encuentran las restantes esculturas del Partenón. Habrá una rueda de prensa y no se excluye que tenga una reunión con representantes de organizaciones humanitarias (su especialidad legal).
También se ha dado a conocer una declaración de la atractiva abogada, en la que afirma que «no vengo a Grecia para una fiesta, ni para dar publicidad a mi matrimonio. Vengo para ofrecer mi ayuda sobre el asunto de las esculturas del Partenón». Las autoridades griegas han confirmado que se le entregará el expediente con los datos históricos relacionados con esta importante colección de mármoles atribuidas a Fidias. Tras su estudio, decidirá cual será su papel en la reivindicación.
En la isla de «Mamma Mia!»
Entre sus compañeros en la Universidad de Oxford, Amal tuvo muchos amigos griegos. Uno de ellos, Zísi Fotáki, profesor de Historia Náutica, comenta que Alamuddin ha visitado Grecia muchas veces; la última, una estancia en la isla de Skiáthos (dónde se rodó «Mamma Mia!»), acompañando a Clooney. «A Amal le gusta mucho Grecia», afirma su compañero de universidad, quien destaca su inteligencia y sentido del humor. «Creo que su participación en esta reclamación será importante. Cualquier empeño de Amal puede convertirse en realidad».
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