ELECCIONES MADRID
Las primeras elecciones democráticas convirtieron Madrid en un estercolero
En 1977 se destinó alrededor de 1,2 millones de euros o 200 millones de las antiguas pesetas para limpiar 200 mil metros cuadrados de paredes y asear las calles de propaganda electoral
No existía en 1977 una ordenanza de limpieza en Madrid como l a existente en la actualidad, que penaliza con sanciones económicas la pegada de carteles publicitarios o de propaganda electoral en el mobiliario urbano. En las primeras elecciones generales democráticas que se celebraron en la capital, la ciudad se convirtió en un peligroso estercolero de papel. Cualquier espacio era apto para hacer campaña a golpe de cola. Los pasquines se contaban por millones en el suelo.
Aquel año se calculó que en Madrid había que limpiar 200.000 metros cuadrados de paredes . Se calculó un presupuesto de 200 millones de las antiguas pesetas, o 2,1 millones de euros, para sanear los muros y calles. En toda España hubo que invertir más de 1.000 millones de pesetas (6 millones de de euros) para esta cometida.