POLÍTICA
El PP retrasa la conformación de su gestora en Valencia a la espera de la decisión de Génova
El partido no da por seguro ahora que la junta directiva regional se celebre el martes
Un día después finalizan las declaraciones de los concejales ante el juez
La constitución de la gestora que dirigirá de forma temportal el PP de Valencia se producirá la próxima semana, como ya anunció la presidenta regional del partido, Isabel Bonig, hace tres días . El partido todavía no ha comunicado de forma oficial un día concreto para la celebración de la Junta Directiva Regional, en la que se anunciará el nombre de las personas que conformarán este órgano después de que la dirección del partido en la ciudad fuera disuelta a raíz de la denominada Operación Taula, derivada del caso Imelsa.
La intención en principio era que se celebrara el martes (y así lo había trasladado Bonig), pero parece que finalmente se retrasará a finales de semana , según fuentes del partido. Los nombres que suenan con más fuerza son los de las diputadas nacionales Belén Hoyo y Marta Torrado (que cuentan con el visto bueno de Génova) y el exconseller de Gobernación y diputado Luis Santamaría , el preferido de Bonig. La decisión se podría tomar este fin de semana .
La formación de la gestora discurre en pararelo a la situación de los concejales del Ayuntamiento de Valencia , ya que nueve de los diez se encuentran investigados. Los ocho que han declarado esta semana ante el juez mantienen su condición de imputados y, muy probablemente, sea así también con la única edil que queda por comparecer (María Jesús Puchalt), quien lo hará el próximo miércoles.
La presidenta regional del PPCV dejó claro que se les pediría el acta en el caso de que siguieran como investigados, lo que consideran injusto al no existir auto de imputación y estar la causa bajo secreto de sumario. Así, no descartan un plante para pasar a ser no adscritos, una acción con la que tratarían de permanecer en el Ayuntamiento a la espera de que se archivara el caso (opción de la que se muestran convencidos) y «limpiar» así su imagen, ya dañada.
Por ahora, únicamente dos de ellos tienen intención de marcharse, aunque la decisión final será, en todo caso, personal , máxime teniendo en cuenta que se les podría retirar el sueldo.
